Un experto en epigrafía de la Universidad de Warwick colabora con Google DeepMind para evaluar 'Aeneas', un modelo de IA que transforma la interpretación de inscripciones romanas, mejorando su análisis y contextualización.
Un experto en epigrafía de la Universidad de Warwick ha colaborado con Google DeepMind para evaluar a ‘Aeneas’, un modelo de inteligencia artificial que reimagina las inscripciones romanas. Alison Cooley, profesora de Clásicas e Historia Antigua en dicha universidad, ha coautorado un artículo publicado en la prestigiosa revista Nature, desempeñando un papel clave en la verificación del primer modelo de IA destinado a contextualizar inscripciones antiguas.
Aeneas, cuyo nombre proviene del héroe errante de la mitología grecorromana, está diseñado para ayudar a los historiadores a interpretar, atribuir y restaurar textos fragmentarios. En el mundo romano, la escritura era omnipresente, grabada en todo tipo de objetos, desde monumentos imperiales hasta artículos cotidianos. Las inscripciones ofrecen a los historiadores modernos una rica visión sobre la diversidad de la vida diaria en esa época.
A menudo, estos textos antiguos son fragmentarios, desgastados o deliberadamente dañados, lo que hace casi imposible su restauración y datación sin información contextual. Historiadores han dependido tradicionalmente de su experiencia para identificar 'paralelos', es decir, textos que comparten similitudes en redacción o sintaxis.
Aeneas acelera enormemente este trabajo complejo y laborioso. El modelo analiza miles de inscripciones latinas y recupera paralelismos textuales y contextuales en cuestión de segundos, permitiendo así a los historiadores interpretar y ampliar los hallazgos del modelo.
Como experta global en epigrafía, la profesora Cooley investigó la integridad del análisis realizado por Aeneas. “Me complace haber probado las capacidades de Aeneas mediante un examen detallado de la famosa inscripción romana Res Gestae Divi Augusti”, comentó Cooley. Este texto es un resumen autocomplaciente del emperador Augusto sobre sus logros y ha sido objeto de estudio intensivo.
La profesora Cooley explicó que Aeneas logró contextualizar con precisión las características ambiguas de datación y procedencia de esta inscripción. “Identificó otros textos que mostraban características lingüísticas similares, incluso aquellos encontrados a miles de kilómetros de distancia”, añadió.
Cooley concluyó que esta investigación pionera demuestra las ventajas de la colaboración entre historiadores antiguos y tecnólogos modernos: “Los modelos generativos más avanzados están ayudando a transformar la epigrafía en un campo vanguardista dentro de la investigación histórica”.
Aeneas, desarrollado conjuntamente por Google DeepMind y la Universidad de Nottingham, forma parte de un esfuerzo más amplio para explorar cómo la IA generativa puede ayudar a los historiadores a identificar e interpretar paralelismos a gran escala. Este modelo también puede adaptarse a otros idiomas antiguos y medios históricos, ampliando así su capacidad para establecer conexiones entre diversas evidencias históricas.