Neubond está desarrollando un dispositivo portátil para la rehabilitación de pacientes con accidentes cerebrovasculares, que refuerza la conexión entre nervios y músculos, ofreciendo esperanza y mejorando la recuperación.
Neubond, una startup dedicada a la rehabilitación de pacientes que han sufrido un accidente cerebrovascular, está en plena búsqueda de financiación para apoyar ensayos clínicos y obtener la aprobación regulatoria de su innovador dispositivo de terapia domiciliaria. Este avance busca ofrecer una nueva esperanza a quienes enfrentan largos periodos de rehabilitación para recuperar el uso de sus extremidades.
Los pacientes que han sufrido un ictus suelen experimentar un proceso arduo para reaprender a utilizar sus brazos y piernas. Aunque los fisioterapeutas juegan un papel crucial en este recorrido, gran parte del esfuerzo recae en los propios pacientes. La misión de Neubond es facilitar esta tarea mediante un dispositivo que refuerza la conexión entre nervios y músculos, proporcionando una sensación de retroalimentación física cuando intentan moverse.
Muchos usuarios han experimentado una sensación de esperanza tras usar el dispositivo, y esto es exactamente lo que buscamos ofrecer. Jumpei Kashiwakura Co-fundador, Neubond
El cofundador Jumpei Kashiwakura, junto con Dr. Patrick Sagastegui, desarrolló esta idea durante un proyecto en el Departamento de Bioingeniería, donde trabajaban en la creación de una mano prostética. Al explorar las posibilidades comerciales, se dieron cuenta del potencial del sistema que detecta el deseo de mover la mano.
A pesar de que el mercado de prótesis es limitado y competitivo, encontraron un uso específico para su interfaz en la rehabilitación post-ictus. "Vimos que había una conexión clínica y cierta tracción para la rehabilitación", comenta Dr. Sagastegui.
Con la orientación del profesor Dario Farina, mentor académico del equipo, transformaron esta interfaz en un dispositivo portátil capaz de asistir en el proceso rehabilitador. El brazalete cuenta con una malla densa de sensores musculares miniaturizados integrados con estimuladores, permitiendo así dirigir estímulos precisos a cada músculo del miembro afectado.
Cuando el dispositivo detecta que un paciente desea moverse, puede proporcionar estimulación precisa al músculo correspondiente, reforzando así la señal nerviosa. Esta retroalimentación en tiempo real ayuda a fortalecer la conexión entre intención y ejecución, mejorando el reaprendizaje motor y acelerando la recuperación.
"Hemos probado el dispositivo con más de diez pacientes y después de 15 días se observó un aumento en la amplitud muscular durante los movimientos", explica Dr. Sagastegui. "También notamos mejoras en áreas proximales como las articulaciones del hombro". Para algunos participantes, esto ha significado avances significativos en actividades cotidianas como abrir puertas o escribir a mano.
"Una participante pudo abrazar a su nieta por primera vez después del ensayo", relata emocionado Kashiwakura. "Fue un momento hermoso cuando compartió esa experiencia conmigo".
Neubond ha recibido apoyo del programa Innovate UK ICURe y ha destacado en el Venture Catalyst Challenge, donde obtuvo el primer lugar en 2024 dentro del ámbito Salud y Bienestar. Hasta ahora, han conseguido recaudar £720,000 en subvenciones, incluyendo una prestigiosa beca Proof-of-Concept del Consejo Europeo de Investigación por valor de €150,000.
Con seis empleados a tiempo completo, actualmente participan en el programa MedTech Venture Builder del London Institute for Healthcare Engineering. Además, han encontrado un socio para diseño y fabricación en Corea del Sur que les ayudará a convertir su prototipo en un dispositivo listo para producción.
Patrick Sagastegui (izquierda) y Jumpei Kashiwakura presentan Neubond durante Rehab Week en Chicago.A fin de respaldar este desarrollo, Neubond ha abierto una ronda de financiación inicial que espera cerrar antes de finalizar el año. "Los principales objetivos son finalizar el diseño industrial y buscar certificación tanto en Reino Unido como Estados Unidos", señala Dr. Sagastegui.
La aprobación regulatoria puede ser un proceso largo y costoso para nuevas empresas; sin embargo, Neubond planea lanzar primero una versión simplificada del dispositivo que monitoreará las intenciones de movimiento y guiará a los pacientes sobre cómo continuar su rehabilitación.
Dicha versión requerirá menos exigencias regulatorias comparadas con el dispositivo completo que necesita demostrar efectos terapéuticos mediante ensayos clínicos.
"Muchos pacientes al ser dados de alta no cuentan con apoyo sobre cómo continuar su rehabilitación", afirma Kashiwakura. "Monitorear su actividad muscular puede proporcionarles orientación sobre cómo seguir avanzando correctamente". El dispositivo también sincronizará datos en tiempo real a través de una aplicación móvil para permitir a los clínicos rastrear los progresos realizados por sus pacientes.
A medida que avanza este proyecto innovador, el equipo continúa colaborando con colegas académicos sobre otros usos potenciales para esta tecnología. Por ejemplo, están explorando aplicaciones relacionadas con exoesqueletos donde podrían actuar como interfaces neuronales.
"Nuestro dispositivo también podría servir como interfaz para otras condiciones neurológicas como Parkinson o lesiones medulares", concluye Kashiwakura. "Estamos buscando activamente socios para colaborar en proyectos académicos, clínicos o comerciales".