La Agencia de Emergencias de Andalucía recomienda extremar las medidas de seguridad y autoprotección durante la vuelta al cole, enfatizando la importancia de la educación vial y el acompañamiento en los desplazamientos.
La Agencia de Emergencias de Andalucía (EMA), a través del servicio 1-1-2, ha emitido una serie de recomendaciones dirigidas a padres y alumnos, con el objetivo de garantizar una vuelta al cole segura el próximo miércoles 10 de septiembre. Estas pautas buscan que el inicio del curso escolar se lleve a cabo sin contratiempos.
El servicio 1-1-2 enfatiza la importancia de respetar las normas de seguridad vial. Se insta a los adultos a extremar las medidas de autoprotección y supervisión sobre los más pequeños durante sus trayectos hacia la escuela. La protección de los niños en sus desplazamientos es crucial, ya sea como peatones, en coche, en bicicleta o utilizando el transporte público. La EMA destaca la necesidad de respetar las zonas de paso, aparcamiento, accesos y semáforos, asegurando así la seguridad infantil en todo momento.
Dado que los niños aprenden por imitación, es esencial que los adultos acompañantes, como padres y abuelos, actúen como modelos a seguir. El cumplimiento por parte de los mayores de las normas básicas de seguridad vial no solo protege a los menores, sino que también contribuye a su educación vial diaria.
Ir al colegio caminando o en bicicleta es una alternativa saludable y sostenible. Esta práctica no solo fortalece los lazos familiares, sino que también promueve un estilo de vida activo. La Asociación Española de Pediatría resalta que caminar incrementa la actividad física y cardiovascular, disminuyendo así la obesidad infantil y el sedentarismo. Además, mejora el estado emocional y puede tener un impacto positivo en el rendimiento académico.
Es fundamental que durante los desplazamientos a pie, los niños vayan acompañados por un adulto. Este trayecto debe aprovecharse para enseñarles aspectos clave sobre seguridad vial, como cruzar calles por pasos peatonales mientras se observa el semáforo. Deben aprender a mirar primero a la izquierda, luego a la derecha y nuevamente a la izquierda antes de cruzar.
Los pequeños deben ser instruidos para evitar correr o jugar cerca de la calzada. Es recomendable que siempre caminen por el lado más cercano a la pared y mantengan atención especial ante entradas y salidas de garajes. La EMA recuerda que no se debe caminar entre vehículos estacionados, ya que esto puede aumentar el riesgo de atropellos.
Si se opta por ir en bicicleta, es imprescindible llevar casco y circular por la calzada o carriles habilitados para tal efecto, evitando las aceras. Los niños deben usar prendas reflectantes para ser visibles y señalizar sus maniobras adecuadamente. En cruces y avenidas, siempre deben actuar con prudencia: detenerse antes de cruzar es fundamental.
Se recomienda que los adultos realicen previamente el recorrido con los escolares para identificar puntos peligrosos, cruces críticos y áreas donde deban bajar de la bicicleta.
En caso de que los niños vayan solos al colegio debido a su madurez, es vital que conozcan bien la ruta y estén formados sobre cómo manejar situaciones riesgosas, como rechazar ofertas sospechosas o buscar ayuda en lugares seguros si se sienten amenazados.
Cuando se utilice un coche, el 1-1-2 aconseja evitar aparcamientos en doble fila o paradas no autorizadas, ya que pueden generar situaciones peligrosas tanto para conductores como peatones. Un mal estacionamiento puede obstruir varios carriles y aumentar el riesgo para los niños al acceder al colegio.
Todas las niñas y niños deben utilizar sillas infantiles homologadas adecuadas a su edad y peso en las plazas traseras del vehículo. Aunque sea un trayecto corto o familiar, siempre deben viajar correctamente asegurados con cinturones adaptados a su sillita.
Los menores con una estatura inferior a 1,35 metros deben viajar siempre en la parte trasera del automóvil. Solo podrán ocupar asientos delanteros aquellos mayores de 18 años o quienes superen esta altura bajo condiciones específicas.
El mayor riesgo asociado al uso del autobús escolar ocurre al subir o bajar del mismo; por ello, es crucial respetar las zonas designadas para estas acciones y enseñar a los pequeños cómo hacerlo ordenadamente para evitar accidentes con otros vehículos cercanos.
Asegurarse del cumplimiento normativo relacionado con este tipo de transporte es responsabilidad de padres y tutores. Es importante educar a los niños sobre las normas básicas dentro del autobús: permanecer sentados durante el trayecto, no molestar al conductor y abrocharse correctamente el cinturón.
Tanto familias como docentes deben estar atentos e involucrarse en la educación digital para prevenir situaciones de abuso o acoso online. Fomentar valores como el respeto hacia otros compañeros en línea es fundamental para crear entornos seguros tanto virtuales como físicos.
La comunidad educativa tiene un papel clave: enseñar a detectar contenidos riesgosos e intervenir ante casos de ciberacoso o fraudes digitales es esencial para proteger a los menores.
La EMA también enfatiza que no hay una edad específica para enseñar sobre prevención ante emergencias; lo importante son los contenidos adecuados según cada grupo etario. El año pasado más de mil escolares visitaron la sede regional para conocer cómo actuar ante situaciones críticas.
A partir de este año se ha creado una ‘Pequeguía' destinada a ofrecer consejos prácticos sobre prevención frente accidentes domésticos e incidentes naturales como incendios o terremotos. Esta guía está disponible para descarga en la nueva Plataforma de Emergencias para la Ciudadanía.