I+D Universitario

Desarrollo de una nariz electrónica en Madrid gracias a IMDEA Nanociencia

Investigación Madrid

José Enrique González | Martes 26 de agosto de 2025

La Comunidad de Madrid ha desarrollado una nariz electrónica con sensores de gases, gracias a la investigación del IMDEA Nanociencia, que permite detectar olores con gran precisión.



La Comunidad de Madrid ha dado un paso significativo en el ámbito de la tecnología con el desarrollo de unos innovadores sensores de gases capaces de detectar olores. Este avance es fruto de una colaboración entre el Instituto Madrileño de Estudios Avanzados IMDEA Nanociencia y la Università Cattolica del Sacro Cuore de Milán. La nueva nariz electrónica promete ofrecer una precisión sin precedentes en la identificación de compuestos orgánicos volátiles, siendo capaz de percibir gases como el amoníaco, el dióxido de nitrógeno y vapores de acetona.

Estos sensores han sido diseñados utilizando nanotubos de carbono de pared única, que son materiales altamente eficaces para la detección debido a su gran superficie. Sin embargo, esta alta sensibilidad también presenta un desafío: la baja selectividad. Para abordar este problema, los investigadores han recubierto los nanotubos con moléculas en forma de anillo, lo que mejora significativamente su capacidad para discriminar entre diferentes compuestos químicos.

Nuevas capacidades en la detección química

El funcionamiento de estos sensores se asemeja al sistema olfativo humano, permitiendo identificar compuestos específicos incluso en presencia de interferencias potenciales. Por ejemplo, se logró distinguir el amoníaco entre una variedad amplia de otros vapores. Una capa sensora demostró tener hasta diez veces más sensibilidad y tiempos de respuesta más rápidos simplemente al reducir el grosor de la película utilizada.

La investigación ha sido publicada en la revista Journal of the American Chemical Society, donde no solo se destaca la efectividad de estos sensores para detectar gases complejos, sino también su capacidad para ser personalizados. Esto permite ajustar con precisión las propiedades del sensor, abriendo nuevas posibilidades en el diseño de narices electrónicas que sean tanto inteligentes como escalables.

Un futuro prometedor para las narices electrónicas

Este avance representa un hito importante en la investigación y desarrollo universitario, mostrando cómo las colaboraciones internacionales pueden dar lugar a tecnologías innovadoras que tienen aplicaciones potenciales en diversos campos, desde la seguridad ambiental hasta la industria alimentaria. La posibilidad de crear dispositivos que puedan detectar olores con alta precisión podría transformar múltiples sectores y mejorar la calidad del monitoreo ambiental.

A medida que continúan los desarrollos en esta área, es evidente que la combinación de ciencia avanzada y tecnología puede llevar a soluciones prácticas que beneficien a la sociedad en general.

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