El profesor Sebastian Münstermann abordará la seguridad de los puentes en la Noche de la Ciencia, utilizando la historia de Max y Moritz para ilustrar cómo el tráfico afecta su integridad estructural.
Max y Moritz: Lecciones sobre la seguridad de los puentes
La famosa pareja traviesa, Max y Moritz, se hizo notar en su historia al aserrar un puente como parte de una broma. Aunque tales actos son raros en la vida real, es innegable que los puentes enfrentan el desgaste diario debido al tráfico constante. En la próxima Noche de la Ciencia, el profesor Sebastian Münstermann abordará este tema crucial.
El 14 de noviembre, durante la Noche de la Ciencia 2025, RWTH se convertirá en un escenario para la investigación y el descubrimiento. Desde las 6 de la tarde hasta medianoche, el Complejo de Salas de Conferencias C.A.R.L. y otros nueve lugares del campus ofrecerán una variada programación de conferencias, experimentos y actividades prácticas, todas gratuitas y abiertas al público.
Entre los ponentes destacados se encuentra el profesor Münstermann, quien ocupa la cátedra de Modelado de Materiales en Tecnología de Formado. Su charla, titulada “¡Riddle-Diddle! Lleno de astucia – Lo que Max y Moritz nos enseñan sobre la seguridad de los puentes”, comenzará a las 8 p.m. en el Aula H06.
Previo al evento, el profesor Münstermann compartió algunas ideas sobre su próxima conferencia. Según él, “la historia de Wilhelm Busch nos recuerda humorísticamente que los puentes no son indestructibles”. Aunque nadie los asierra realmente, esta anécdota resalta una verdad importante: los puentes pueden sufrir daños con el tiempo debido al estrés constante y al uso intensivo.
Cuando hablamos de seguridad en puentes hoy en día, generalmente nos referimos a grandes estructuras viales. ¿Por qué se deterioran? Cada día, estos puentes soportan una carga enorme proveniente de miles de vehículos, incluidos camiones pesados. El tráfico de mercancías ha aumentado drásticamente desde la reunificación del país en 1990, dejando huellas visibles en las estructuras – lo que conocemos como fatiga del material. A diferencia de los seres humanos, los puentes no pueden recuperarse con un buen descanso nocturno; por lo tanto, incluso sin las travesuras de Max y Moritz, eventualmente se desgastan.
“Exactamente”, responde Münstermann cuando se le pregunta si eso significa que a menudo deben ser demolidos. “Aún no hemos descubierto ningún ‘proceso curativo’ para las estructuras metálicas fatigadas”. Las opciones son reparar o reemplazar; a menudo, reparar ya no resulta rentable. Además, los puentes deben cumplir con los estándares actuales de seguridad y capacidad, lo que puede hacer que una reconstrucción completa sea la opción más viable.
A pesar de esto, asegura entre risas que “no habrá demoliciones durante la Noche de la Ciencia”. En su lugar, planea demostrar cómo los ingenieros desarrollan materiales que hacen a los puentes más resistentes y cómo se prueba su integridad. Su objetivo es mostrar al público por qué las inspecciones regulares son tan esenciales y cómo la ciencia de materiales ayuda a garantizar que nuestros puentes permanezcan seguros para todos.