El equipo Hap.py de la ETSII debutó exitosamente en SWERC 2024, resolviendo cinco problemas y clasificándose noveno. Se preparan para futuros retos, destacando la importancia de estas competiciones en su formación.
Debut prometedor de Hap.py en SWERC
La participación en competiciones internacionales de programación se ha convertido en un catalizador para el talento del estudiantado de la ETSII. En este contexto, el equipo Hap.py, integrado por Olga Somalo Serrano, estudiante de 5º de Ingeniería del Software y Matemáticas; Iván Coello Rivera, de 2º de Ingeniería Informática; y José Manuel Fernández Moreno, también de 2º de Ingeniería Informática, hizo su debut en el renombrado concurso internacional SWERC 2024.
El principal objetivo del equipo era adquirir experiencia para futuras ediciones, pero lograron superar todas las expectativas. Durante los entrenamientos, resolvían tres problemas, mientras que en la competición oficial alcanzaron a resolver cinco, lo que evidenció una notable evolución en su desempeño.
No solo lograron mejorar su rendimiento, sino que dos de sus integrantes se proclamaron campeones en su categoría. Además, el equipo se clasificó para la final nacional universitaria, donde alcanzó una destacada novena posición. La ETSII, que ha estado participando ininterrumpidamente desde 2016, brindó apoyo al equipo mediante la financiación del viaje y facilitando entrenamientos previos, lo que reforzó tanto su preparación como su visibilidad institucional.
Competir en SWERC representa un gran desafío. Muchas universidades europeas dedican más recursos y horas a la preparación. En España, la UPC es la única que ha llegado a una final mundial, seguida por equipos como UMU o UCM. La ETSII, aunque aún con menos experiencia acumulada, se encuentra en un tercer escalón competitivo junto a universidades como la Autónoma, A Coruña y Valencia.
A raíz de esta primera experiencia positiva, el equipo Hap.py ya se encuentra preparando sus próximos desafíos: el concurso “Las 12 Uvas”, programado para finales de año, y la competición “Ada Byron” en marzo. El grupo sigue entrenando con dedicación, convencido de que este esfuerzo es clave para continuar avanzando. Este año contaron con el apoyo de una estudiante veterana cuya experiencia fue crucial para guiar al equipo y transmitirles confianza durante su primera gran prueba internacional.
Los integrantes del equipo destacan que participar en este tipo de competiciones les proporciona valiosa experiencia práctica tanto para sus estudios como para su futuro profesional. Además, contribuye a consolidar un relevo generacional con un gran potencial dentro del ámbito tecnológico.