Los datos más recientes del SEPE, que fueron publicados el 5 de noviembre, indican que al final de octubre, el número total de personas en situación de desempleo alcanzó los 2.602.054. Esto representa un aumento de 26.769 individuos (1,04%) en comparación con septiembre. Además, el desempleo juvenil, es decir, entre aquellos menores de 25 años, también ha experimentado un crecimiento, sumando 8.361 jóvenes (4,35%) respecto al mes anterior.
Según información del INE, la tasa de desempleo juvenil en España se elevó hasta el 26,9% al finalizar el tercer trimestre. Este dato contrasta notablemente con la tasa de la eurozona, que se ubicó en el 14,4% durante septiembre. Este fenómeno resalta una vez más la significativa brecha entre la formación académica y las habilidades realmente demandadas en sectores clave.
La dualidad del sistema de Formación Profesional Dual se presenta como un dilema entre la solución y el desconocimiento.
En este contexto, la Formación Profesional Dual se presenta como una herramienta clave para cerrar la brecha entre los conocimientos adquiridos y las demandas del mercado laboral, lo que a su vez mejora la empleabilidad de los jóvenes. Esta modalidad educativa combina de manera efectiva el aprendizaje teórico con la experiencia práctica, permitiendo a los estudiantes formarse en el mismo entorno empresarial. Además, este sistema no solo está destinado a los jóvenes, sino que también ofrece una oportunidad valiosa para aquellos trabajadores que desean reorientar su trayectoria profesional y avanzar en su carrera.
La relevancia de esta formación se ha evidenciado especialmente tras los devastadores acontecimientos ocasionados por la DANA en Levante, afectando notablemente a la Comunidad Valenciana. En esta región, existe una demanda urgente de perfiles técnicos y profesionales capacitados para desempeñar funciones especializadas en áreas como construcción, mantenimiento, mecánica, limpieza, sanidad y logística.
En conclusión, estos sectores son fundamentales para el fortalecimiento y la recuperación de viviendas, edificios e infraestructuras, así como para brindar asistencia a las personas afectadas.
La cuestión de la sobrecualificación ha sido objeto de análisis en numerosas ocasiones, aunque los datos históricos revelan que aquellos con niveles educativos más altos tienden a tener mejores oportunidades para acceder a un empleo. Por lo tanto, no es sorprendente que los jóvenes opten por formarse en estos niveles.
No obstante, el verdadero desafío radica en la coherencia entre las habilidades adquiridas y las exigencias del mercado laboral. De acuerdo con el informe Estado del mercado laboral en España 2023, elaborado por InfoJobs y Esade, se observa que el 32% de los postulantes a ofertas de empleo posee estudios universitarios, mientras que solo el 12% de las posiciones disponibles requería dicha formación. En contraste, al analizar la situación de la Formación Profesional, se puede notar que esta discrepancia casi desaparece.
No obstante, ¿cuál es la situación actual de la Formación Profesional Dual? La plataforma de empleo más destacada en España, InfoJobs, ha desarrollado un Informe sobre la Formación Profesional Dual. Este documento tiene como objetivo ofrecer un análisis exhaustivo acerca de las oportunidades y desafíos que presenta este modelo educativo, fundamentándose en una encuesta realizada a responsables de Recursos Humanos y tomadores de decisiones en el ámbito de la contratación.
Según Mónica Pérez, quien es la directora de Comunicación y Estudios de InfoJobs: “Este tipo de formación no solo proporciona una formación técnica y práctica adaptada a las demandas actuales del mercado, sino que también brinda una vía rápida y efectiva para la inserción laboral puesto que los estudiantes no solo aprenden en la propia empresa, sino que también aportan valor. En ese sentido, la alta cifra de paro juvenil hace más evidente la necesidad de buscar opciones formativas más prácticas que preparen a los profesionales para la realidad laboral y ofrezcan buenas perspectivas salariales”.
La importancia de este enfoque formativo radica en su capacidad para responder a las exigencias del entorno laboral actual. Los estudiantes tienen la oportunidad de adquirir conocimientos directamente en el ámbito empresarial, lo cual les permite no solo aprender, sino también contribuir significativamente.
Además, frente a la alarmante tasa de desempleo entre los jóvenes, se vuelve crucial explorar alternativas educativas que sean más prácticas. Estas opciones son esenciales para equipar a los futuros profesionales con las habilidades necesarias para enfrentar el mundo laboral y asegurarles un futuro con mejores oportunidades económicas.
Las empresas que participan consideran que existen más ventajas que desventajas.
La nueva Ley Orgánica de FP ha sido aprobada, y a partir del curso 2024-2025, se implementará un modelo educativo de carácter dual, lo que significa el fin del enfoque tradicional. Esta transformación está en línea con las expectativas del Ministerio de Educación, que anticipa un aumento del aproximadamente 4,5% en la matrícula de alumnos para este tipo de formación, superando así los 1,2 millones de estudiantes.
El objetivo para este año es integrar plenamente la experiencia práctica dentro del proceso educativo, lo que facilitará una mejor transición hacia el mercado laboral y permitirá que las habilidades adquiridas estén más alineadas con las demandas empresariales. Sin embargo, a pesar de las ventajas mencionadas anteriormente, la participación de las empresas sigue siendo bastante limitada. De hecho, según datos proporcionados por el Consejo Económico y Social de España (CES), solo un 0,3% del total de empresas activas en España participa en programas de Formación Profesional Dual.
Desde el curso 2012-2013, en España se ha implementado el modelo educativo de la Formación Profesional Dual. No obstante, según datos proporcionados por InfoJobs, este sistema no es ampliamente reconocido por las empresas. A pesar de haber estado en funcionamiento durante 12 años, más del 52% de las empresas aún no tiene conocimiento sobre él, y este porcentaje disminuye en función del tamaño de la empresa.
Entre las empresas que no están familiarizadas con la FP, un 30% desconoce cualquier tipo de sistema de Formación Profesional. Por otro lado, un 22% está al tanto del sistema antiguo, pero no del actual. En contraste, se observa que el 48% de las empresas sí tiene conocimiento sobre la FP Dual. Al analizar el tamaño empresarial, se destaca que las compañías más grandes son las que tienen mayor familiaridad con este modelo, alcanzando un 68%, en comparación con solo un 41% de las microempresas.
Las políticas de empleo se presentan como una herramienta fundamental para disminuir la brecha existente entre la formación y la demanda.
A pesar de que el desconocimiento sigue siendo considerable, las empresas involucradas en programas de Formación Profesional Dual resaltan más beneficios que desventajas, y todos estos aspectos influyen positivamente en el rendimiento de la organización. Aunque es cierto que dedicar tiempo a la formación del aprendiz es necesario, este va adquiriendo conocimientos mientras trabaja, lo cual permite que sus contribuciones generen resultados tangibles en las empresas desde el principio.
La ventaja principal, mencionada por el 39% de las empresas que no están en la FPD, es la posibilidad de seleccionar estudiantes basándose en su experiencia; una afirmación respaldada por el 57% de las compañías que sí participan. Además, el ahorro en costes de selección se considera un aspecto muy apreciado por los participantes (31%) en comparación con aquellos que no forman parte (19%).
En contraste, una desventaja significativa para una de cada tres empresas que no están involucradas en la FPD es el tiempo que deben dedicar los tutores. Esta situación es respaldada por el 45% de las empresas que sí participan. Por otro lado, para aquellas que actualmente no forman parte, un aspecto muy importante es la falta de conocimiento, que representa un 28%.
El Informe sobre Políticas Activas de Empleo, que se centra en la población activa, proporciona una visión general sobre la situación actual en el ámbito de la formación. Más del 55% de los desempleados en España no tiene conocimiento del término ‘política activa de empleo’. Por otro lado, entre aquellos que sí están informados, que representan el 45%, solo un 40% ha podido acceder a los beneficios disponibles. De estos, la formación y la cualificación profesional ocupan el primer lugar, alcanzando un 20%. En cuanto a los grupos etarios, son los jóvenes desempleados quienes más aprovechan estas oportunidades. Esto se refleja tanto en la formación y cualificación profesional, donde el 21% de los individuos de entre 16 y 24 años se beneficia, como en la información y orientación laboral, con un 17% en este mismo rango de edad.