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La radiación ultravioleta en Marte podría permitir la existencia de vida

Radiación Marte

José Enrique González | Lunes 19 de mayo de 2025

Un estudio del Centro de Astrobiología revela que la radiación ultravioleta en Marte, medida por el rover Curiosity, es comparable a la de la Tierra primitiva. Aunque la radiación UV-C es altamente dañina, los niveles en Marte no son completamente incompatibles con la vida. Este hallazgo subraya la importancia de implementar medidas estrictas para evitar la contaminación terrestre en futuras misiones al planeta rojo.



La radiación ultravioleta en Marte: ¿una oportunidad para la vida?

La radiación ultravioleta más perjudicial para los seres vivos, conocida como UV-C, es absorbida en gran medida por la capa de ozono en la Tierra. Sin embargo, en Marte, la escasa cantidad de ozono presente en su atmósfera permite que esta radiación llegue a la superficie con una intensidad notablemente alta.

Un reciente estudio liderado por el Centro de Astrobiología (CAB, CSIC-INTA), junto con el Instituto de Química Física Blas Carrera (IQF-CSIC), ha revelado que las dosis de radiación ultravioleta medidas desde la superficie marciana son comparables a las que se cree existían en la Tierra primitiva. Esto sugiere que, a pesar de su poder esterilizante, no son completamente incompatibles con la existencia de vida.

El trabajo fue publicado en la renombrada revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). Utilizando datos recopilados por el instrumento REMS del rover ‘Curiosity’ de la NASA, los investigadores analizaron durante más de cinco años marcianos las dosis de radiación UV en tres bandas: UV-A, UV-B y UV-C. La radiación UV-A tiene menor energía, mientras que UV-B y UV-C son más potentes y dañinas para los organismos vivos. En contraste con la protección que ofrece la atmósfera terrestre, Marte presenta una atmósfera cien veces más tenue que permite que estas radiaciones lleguen casi sin obstáculos a su superficie.

Niveles de radiación y sus implicaciones

Según los datos obtenidos, aproximadamente el 80% de la radiación UV que alcanza el cráter Gale está compuesta por UV-A, un 15% por UV-B y solo un 5% por UV-C. Los investigadores del CAB, entre ellos Daniel Viúdez-Moreiras, María Paz Zorzano y Alberto González Fairén, explican que esta limitada protección atmosférica se debe al polvo suspendido en el aire marciano y al bajo contenido de ozono.

El estudio también destaca variaciones drásticas y rápidas en los niveles de radiación UV, capaces de cambiar más del 30% en pocos días marcianos. Estas fluctuaciones son complejas e impredecibles según los modelos atmosféricos actuales, lo que hace esencial contar con instrumentación adecuada en Marte para comprender mejor su entorno radiactivo.

A pesar de que las dosis de radiación ultravioleta son significativamente mayores que las presentes hoy en día en la Tierra, se asemejan a las condiciones que podrían haber existido durante los primeros miles de millones de años tras la formación del planeta. Esto plantea interrogantes sobre si estas condiciones podrían permitir algún tipo de vida microbiana sobreviviente o si son suficientes para erradicar cualquier microorganismo terrestre transportado por misiones espaciales futuras. Por ello, los científicos subrayan la importancia de implementar estrictas medidas para evitar la contaminación planetaria durante futuras exploraciones tripuladas.

Este estudio ha contado con el apoyo del equipo detrás de la misión Mars Science Laboratory (MSL) y ha sido financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y el proyecto ‘MarsFirstWater’, otorgado por el Consejo Europeo de Investigación.

La noticia en cifras

Tipo de Radiación Porcentaje
UV-A 80%
UV-B 15%
UV-C 5%
Años Marcianos Estudiados Más de 5 años
Años Terrestres Equivalentes Más de 10 años

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