Un estudio de la Universidad de Warwick revela desigualdades en el acceso a cuidados para la menopausia en el NHS, afectando especialmente a mujeres de comunidades étnicas diversas. Se proponen medidas para mejorar la atención.
Un reciente estudio de la Warwick Medical School ha puesto de manifiesto cómo las mujeres experimentan la menopausia y acceden a la atención médica dentro del NHS, centrándose en las desigualdades que se derivan de la etnicidad, el estatus socioeconómico y las normas culturales. A pesar de que en los últimos años la menopausia ha ganado visibilidad en los medios de comunicación y en el discurso público, **los beneficios de esta concienciación no se distribuyen equitativamente** en el Reino Unido. Las mujeres negras y asiáticas son aproximadamente un 80% menos propensas a recibir terapia hormonal sustitutiva (HRT).
Para abordar estas cuestiones, el estudio MenopauseGAP, llevado a cabo por Warwick Medical School, ha publicado sus hallazgos en dos investigaciones en el British Journal of General Practice. Estas investigaciones cualitativas incluyeron entrevistas en profundidad y grupos focales para explorar diversas experiencias relacionadas con la menopausia y la atención correspondiente. En una de las investigaciones, se entrevistó a una muestra diversa de cuarenta mujeres de entre 40 y 60 años, mientras que en la otra participaron quince profesionales de salud.
Dr. Claire Mann, investigadora asociada en WMS, afirmó: “Nuestros hallazgos muestran que la atención durante la menopausia no llega a todas las mujeres por igual debido a diversos factores. El trabajo futuro para mejorar esta atención dentro del NHS debe incluir educación sanitaria específica e interseccional tanto para pacientes como para clínicos; especialmente para aquellas mujeres que pueden desear un tratamiento holístico pero no pueden acceder a él debido a las limitaciones actuales.”
El primer estudio identificó tres temas principales relacionados con las experiencias femeninas:
1. Contexto de atención: Las presiones de la vida moderna suelen amplificar los síntomas de la menopausia. Muchas mujeres expresaron frustración ante la comercialización de tratamientos para la menopausia y confusión sobre fuentes confiables de información.
2. Experiencia de atención: Las consultas médicas frecuentemente estaban cargadas emocionalmente, donde las mujeres sentían que debían abogar fuertemente por HRT o ajustar su comportamiento para evitar estereotipos.
3. Influencias sociales y culturales: Normas culturales en muchas comunidades negras y sudasiáticas desincentivan la discusión abierta sobre la menopausia, dejando a las mujeres sin información relatable o representación adecuada en materiales sanitarios.
En el segundo estudio, los profesionales sanitarios también reportaron desafíos similares:
1. Conciencia desigual: El creciente interés público ha llevado a más mujeres a buscar HRT, pero el estigma cultural y una educación limitada aún impiden que muchas accedan a cuidados.
2. Desafíos clínicos: Diagnosticar la menopausia puede ser complicado, ya que sus síntomas se superponen con trastornos mentales y hay una creciente demanda por tratamientos no autorizados como HRT y testosterona.
3. Barreras sistémicas: Las brechas lingüísticas, los servicios de interpretación mal financiados y las consultas limitadas en tiempo obstaculizan la comunicación, dejando menos probabilidades a las mujeres desfavorecidas de buscar o recibir apoyo.
Dr. Sarah Hillman, profesora asociada clínica de salud femenina y atención primaria en la Universidad de Birmingham (anteriormente en WMS), destacó: “Debemos reconocer que la atención durante la menopausia no es un enfoque único para todas. La sensibilidad cultural, representación e información clara son claves para asegurar que todas las mujeres reciban el apoyo necesario.”
Nina Kuypers, fundadora del grupo Black Women in Menopause, enfatizó: “Es evidente que los actuales servicios médicos no logran capturar toda una gama de experiencias relacionadas con la menopausia, lo que resulta en múltiples demografías –especialmente dentro de comunidades negras y sudasiáticas– dejadas atrás para luchar en silencio.”
A raíz del estudio MenopauseGAP, financiado por el National Institute for Health and Care Research (NIHR), se han propuesto recomendaciones urgentes para abordar estas desigualdades:
A través de estas iniciativas se busca garantizar un acceso equitativo al apoyo durante la menopausia y al tratamiento hormonal sustitutivo (HRT). Este esfuerzo es fundamental para transformar cómo se aborda este proceso natural que afecta a millones de mujeres.
FIN DEL COMUNICADO