La Universidad de Córdoba ha logrado reducir un 21% la producción de residuos peligrosos en el último año, según los indicadores ambientales actualizados. Además, se ha registrado una disminución del 14% en el consumo de agua y del 5,6% en energía. Sin embargo, el uso de papel y gas natural ha aumentado. También se destaca un cambio en los hábitos de movilidad, con un incremento en el uso del transporte público entre la comunidad universitaria.
El Servicio de Protección Ambiental del Vicerrectorado de Campus Sostenible de la Universidad de Córdoba (UCO) ha dado a conocer los últimos indicadores ambientales de la institución, revelando una notable disminución del 21% en la generación de residuos peligrosos durante el último año analizado. Este significativo avance se suma a mejoras en el consumo de agua y energía, reflejando así el firme compromiso de la UCO con la sostenibilidad.
Los nuevos indicadores ambientales para 2024 están disponibles en la web oficial de la UCO (https://www.uco.es/sepa/es/indicadores-ambientales). Estos datos ofrecen una visión integral del impacto ambiental que genera la universidad, abarcando aspectos como el consumo de agua, energía, gas natural y papel, así como la gestión de residuos y los hábitos de movilidad entre toda la comunidad universitaria.
Al comparar con el año anterior, se observa que la UCO ha conseguido una reducción del 14% en el uso de agua y un 5,6% en el consumo energético. Sin embargo, también se registraron incrementos preocupantes: el consumo de papel creció un 21%, mientras que el gas natural aumentó un 11%. A pesar de estos datos negativos, destaca positivamente la reducción del 21% en residuos peligrosos respecto a 2023, lo cual es un paso crucial hacia la minimización del impacto ambiental derivado de las actividades universitarias.
En términos de movilidad, se han registrado cambios significativos en los hábitos de transporte. El uso del vehículo particular para acceder a los campus ha descendido del 41%