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Catherine D’Ignazio: Empoderando comunidades a través de la ciencia de datos y la justicia social

Redacción | Lunes 02 de diciembre de 2024

Catherine D’Ignazio, profesora asociada del MIT, se centra en la intersección entre datos y justicia social. Su trabajo busca empoderar a comunidades marginadas mediante el acceso a información y la creación de herramientas de inteligencia artificial para abordar problemas como el feminicidio. A través de su libro "Counting Feminicide", destaca la importancia de la ciencia de datos ciudadana y cómo esta puede transformar la participación cívica y desafiar desigualdades estructurales en la sociedad.



Es bastante habitual en el discurso público que alguien declare: “He traído datos a esta discusión”, presentando así sus propias conclusiones como si fueran empíricas y racionales. Sin embargo, es menos común cuestionar: ¿De dónde provienen esos datos? ¿Cómo se recopilaron? ¿Por qué hay datos sobre ciertos temas y no sobre otros?

La profesora asociada del MIT, Catherine D’Ignazio, plantea este tipo de preguntas. Con un amplio portafolio de trabajo, tiene un gran interés en aplicar los datos a problemas sociales, frecuentemente para ayudar a quienes están desposeídos a acceder a cifras y proporcionar una visión más completa de los problemas cívicos que intentamos abordar.

Un enfoque innovador hacia el feminicidio

“Si queremos que una ciudadanía educada participe en nuestra democracia utilizando datos y argumentos basados en ellos, debemos considerar cómo diseñamos nuestras infraestructuras de datos para apoyarlo”, afirma D’Ignazio.

Tomemos como ejemplo el problema del feminicidio, el asesinato de mujeres como resultado de la violencia de género. Activistas en toda América Latina comenzaron a tabular casos y construir bases de datos que a menudo eran más exhaustivas que los registros oficiales del estado. D’Ignazio ha observado esta problemática y, junto con colegas, co-diseñó herramientas de inteligencia artificial con defensores de derechos humanos para respaldar su labor de monitoreo.

El libro de D’Ignazio titulado “Counting Feminicide”, publicado en 2024, documenta todo este proceso y ha ayudado a llevar el tema a nuevas audiencias. Donde antes había un vacío de datos, ahora existen bases de datos sustanciales que ayudan a las personas a reconocer la realidad del problema en múltiples continentes, gracias al esfuerzo innovador de ciudadanos comprometidos. El libro describe cómo la ciencia de datos desde la base y el activismo ciudadano son formas emergentes de participación cívica.

Una trayectoria marcada por la justicia social

D’Ignazio ha cultivado desde hace tiempo un interés por la ciencia de datos, el diseño digital y los asuntos globales. Obtuvo su licenciatura en relaciones internacionales en Tufts University, luego trabajó como desarrolladora de software en el sector privado. Al regresar a sus estudios, obtuvo un MFA en el Maine College of Art y posteriormente un MS en el MIT Media Lab, lo que le permitió sintetizar su perspectiva intelectual.

“El Media Lab fue para mí el lugar donde pude converger todos esos intereses que había estado considerando”, dice D’Ignazio. “¿Cómo podemos tener aplicaciones más creativas del software y las bases de datos? ¿Cómo podemos lograr aplicaciones más justas socialmente de la inteligencia artificial? Y, ¿cómo organizamos nuestra tecnología y recursos para un futuro más participativo y equitativo para todos?”

D’Ignazio no pasó todo su tiempo en el Media Lab abordando cuestiones relacionadas con bases de datos. En 2014 y 2018 co-organizó un hackathon feminista llamado “Make the Breast Pump Not Suck”, donde cientos de participantes desarrollaron tecnologías e innovaciones para abordar la salud posparto y la alimentación infantil. Aun así, gran parte de su trabajo se ha centrado en la arquitectura de datos, visualización y análisis sobre la relación entre producción de datos y sociedad.

Fomentando la innovación estudiantil

D’Ignazio comenzó su carrera docente como conferenciante en el programa Digital + Media del Rhode Island School of Design antes de convertirse en profesora asistente en visualización de datos y medios cívicos en el departamento de periodismo del Emerson College. Se unió al cuerpo docente del MIT como profesora asistente en 2020.

Su primer libro, “Data Feminism”, coautorado con Lauren Klein de Emory University y publicado en 2020, examina diversas maneras en las que los datos cotidianos reflejan la sociedad cívica que los produce. Por ejemplo, las tasas reportadas de agresión sexual en campus universitarios pueden ser engañosas porque las instituciones con las tasas más bajas podrían ser aquellas con climas problemáticos para las sobrevivientes.

La perspectiva global de D’Ignazio —quien ha vivido en Francia, Argentina y Uruguay— le ha permitido comprender las políticas regionales y nacionales detrás de estos problemas, así como los desafíos que enfrentan los vigilantes ciudadanos respecto a la recolección de datos. Nadie debería pensar que tales proyectos son sencillos.

Desafíos estructurales en la recopilación de datos

“Se requiere mucho trabajo grassroots para producir datos”, señala D’Ignazio. “Es realmente interesante observar la enorme cantidad de esfuerzo que realizan grupos científicos o ciudadanos para hacer útiles los datos. Muchas veces esto se debe a estructuras institucionales deficientes”.

En general, la cuestión sobre quién participa en la ciencia de datos es lo que D’Ignazio y Klein han denominado “el elefante en la sala del servidor”. Como profesora asociada, D’Ignazio se esfuerza por alentar a todos sus estudiantes a reflexionar abiertamente sobre la ciencia de datos y sus fundamentos sociales. A su vez, también se inspira en estudiantes productivos.

“Parte del gozo y privilegio de ser profesora es tener estudiantes que te llevan hacia direcciones que tú misma no habrías explorado”, afirma D’Ignazio.

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