Una reciente investigación internacional revela que los pacientes tienden a rechazar la inteligencia artificial en medicina si su salud es deficiente, destacando la necesidad de adaptar estas tecnologías a sus necesidades.
La percepción de los pacientes sobre la inteligencia artificial (IA) en el ámbito médico ha sido objeto de estudio en diversas investigaciones, pero hasta ahora no se había explorado a gran escala. Recientemente, un equipo internacional llevó a cabo una encuesta que abarcó seis continentes y más de 14,000 pacientes en 74 hospitales, revelando datos significativos sobre sus opiniones respecto al uso de la IA en la medicina.
El hallazgo central indica que **la aceptación de la IA disminuye** conforme empeora el estado de salud del paciente. Así, aquellos con condiciones graves tienden a rechazar su implementación en tratamientos médicos. Este estudio busca orientar el desarrollo futuro de aplicaciones de IA para que se alineen mejor con las necesidades y preocupaciones de los pacientes.
En términos generales, el 57.6% de los encuestados expresó una opinión favorable hacia la IA en medicina. Sin embargo, se observaron variaciones significativas entre géneros: **los hombres mostraron un 59.1%** de aprobación frente al 55.6% de las mujeres. Además, aquellos con mayor familiaridad con la tecnología y un entendimiento más profundo sobre la IA tendieron a ser más receptivos; **el 83.3%** de quienes afirmaron tener un buen conocimiento sobre IA apoyaron su uso en el sector salud.
Por otro lado, la investigación también destacó que **la gravedad de la enfermedad influye directamente** en la percepción negativa hacia la IA. Más del 55% de los pacientes con condiciones críticas manifestaron actitudes desfavorables hacia esta tecnología, comparado con solo un 6.6% entre aquellos que se consideraban saludables.
Los resultados también revelaron preferencias claras entre los participantes respecto al uso y diseño de herramientas basadas en IA. Un notable **70.2%** consideró fundamental que las decisiones tomadas por sistemas de IA sean "explicables", es decir, que sus resultados sean comprensibles para los usuarios. Además, un **72.9%** expresó que deseaba que estas tecnologías funcionaran como herramientas complementarias, manteniendo así el control en manos de médicos humanos.
A pesar del interés por integrar la IA en diagnósticos médicos, solo un **4.4%** respaldó diagnósticos completamente automatizados por parte de máquinas, mientras que un pequeño porcentaje (6.6%) prefería diagnósticos sin ninguna intervención tecnológica.
Los investigadores advierten sobre una limitación metodológica relacionada con el contexto temporal del estudio realizado en 2023; desde entonces, los modelos lingüísticos han avanzado considerablemente y podría haber cambios significativos en las actitudes hacia la IA entre los pacientes. Dr. Felix Busch, asistente médico del Instituto para Radiología Diagnóstica e Intervencionista de TUM y uno de los autores principales del estudio, subraya: "Para entender cómo evoluciona esta percepción y asegurar que las aplicaciones médicas se adapten a las necesidades reales de los pacientes, son necesarias investigaciones adicionales".
Una nueva fase del estudio COMFORT ya está programada para explorar estas dinámicas utilizando el mismo cuestionario inicial.