Estudiar en EE. UU. potencia el rendimiento académico y la madurez personal

The Lemon Tree Education ha resaltado recientemente que estudiar un año escolar en Estados Unidos no solo mejora el dominio del inglés, sino que también potencia el rendimiento académico, fomenta la madurez personal y abre nuevas oportunidades para el futuro.

Realizar un curso académico completo en EE. UU. representa una experiencia transformadora tanto a nivel personal como educativo. El programa J-1, establecido por el gobierno estadounidense en 1961, permite a estudiantes internacionales de secundaria vivir esta inmersión cultural, conviviendo con familias anfitrionas y asistiendo a instituciones educativas locales.

Beneficios del intercambio educativo

Cada año, cientos de jóvenes españoles de ESO y Bachillerato se embarcan en esta aventura. Según Oliver Rodríguez-Pearson, experto en educación internacional y portavoz de The Lemon Tree Education, “es un antes y un después, tanto para ellos como para sus familias”.

El crecimiento personal es uno de los principales beneficios. Un estudio realizado por AFS Intercultural Programs revela que el 92% de los participantes han mejorado habilidades clave como la adaptación y la comunicación intercultural. “Son competencias esenciales para cualquier carrera futura y se desarrollan de forma natural durante la inmersión”, añade Rodríguez-Pearson.

Impacto académico y profesional

De acuerdo con Rotary Youth Exchange, el 95% de los jóvenes que participan en estos programas regresan más maduros e independientes. “Vuelven con otra mirada, otra energía”, comenta Rodríguez-Pearson. “Después de haber vivido en otro país y enfrentado nuevos retos, regresan con ganas de aportar y crecer”.

A nivel académico y profesional, los beneficios son notables. Un informe del Council on Standards for International Educational Travel (CSIET) indica que el 89% de los estudiantes internacionales mejora significativamente su nivel de inglés y su rendimiento académico general tras su experiencia en EE. UU.

Además, estudiar en Estados Unidos se convierte en una ventaja competitiva al momento de acceder a estudios superiores. Según la American Council on Education (ACE), el 78% de estos estudiantes logran ingresar a universidades fuera de su país de origen, comparado con el 41% a nivel global.

Acompañamiento personalizado para las familias

La decisión de enviar a un hijo a estudiar al extranjero no es sencilla; surgen dudas y temores. Por ello, contar con una guía experta resulta crucial. En The Lemon Tree Education, cada estudiante recibe atención personalizada desde el inicio: orientación inicial para las familias, sesiones preparatorias antes del viaje y seguimiento continuo durante toda la estancia. “Nuestro objetivo es que la experiencia sea un impulso, no una complicación”, enfatiza Rodríguez-Pearson.

Para aquellas familias interesadas en proporcionar a sus hijos una experiencia transformadora, The Lemon Tree Education ofrece información detallada sobre el programa J-1, resolviendo todas las inquietudes sin compromiso alguno.

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