La Xunta de Galicia avanza en la implementación de la inteligencia artificial. El presidente del Gobierno gallego, Alfonso Rueda, ha dado a conocer que el Consello ha aprobado el Programa Galego de Intelixencia Artificial para el período 2026-2028. Este plan, que cuenta con un presupuesto de 54 millones de euros, tiene como objetivo principal **generalizar el uso de esta tecnología** en la administración pública, las empresas y la vida cotidiana de los ciudadanos gallegos.
Rueda destacó que uno de los enfoques fundamentales del programa es “ampliar los servicios públicos” que se ofrecerán a través de la inteligencia artificial en áreas críticas como la administración, la sanidad y la gestión de residuos. Este proyecto representa una segunda fase dentro de la Estratexia Galega de IA 2030, que busca establecer un marco operativo y normativo para el desarrollo ordenado de esta tecnología en Galicia.
Cuatro ejes estratégicos para el desarrollo de la IA
El Programa se estructura en torno a cuatro ejes principales: Galicia Rexión Intelixente, que promueve capacidades estructurales; Talento y competencia en IA a lo largo de la vida, enfocado en capacitar a los ciudadanos; Adopción estratégica de la IA, destinada a fomentar su uso tanto en la Xunta como en empresas; y I+D+i orientado a las necesidades económicas, que impulsa proyectos académicos y de investigación sobre inteligencia artificial.
Este ambicioso programa establece las bases para crear una infraestructura digital adaptada a las potencialidades de la inteligencia artificial. Para garantizar su efectividad, será necesaria una plataforma transversal que permita almacenar, analizar y gestionar los datos manejados por la Administración. La Plataforma de Servicios Transversales incluirá mecanismos para supervisar el funcionamiento de los sistemas y espacios controlados para realizar pruebas.
Aplicaciones prácticas en la administración pública
Entre las aplicaciones previstas del programa, destaca la gestión inteligente de atención al ciudadano, que permitirá ofrecer información actualizada mediante asistentes virtuales. Además, se contempla una tramitación electrónica más ágil y sencilla para los procedimientos administrativos.
En cuanto a los servicios públicos, se planea implementar soluciones inteligentes para la gestión de residuos y autorizaciones ambientales, así como mejorar la coordinación ante emergencias mediante análisis en tiempo real. También se prevé optimizar el transporte público con plataformas inteligentes que analicen las necesidades del usuario, además de desarrollar sistemas predictivos para incendios forestales y reestructuración territorial agrícola.
Fomento del uso de IA en administraciones locales y empresas
El Programa también incluye iniciativas destinadas a facilitar la adopción de tecnologías basadas en inteligencia artificial por parte de las administraciones locales. Se promoverá una simplificación en los procesos contractuales relacionados con soluciones de IA, similar a lo que ya ocurre con ciberseguridad. Asimismo, se impulsará el uso compartido entre diferentes administraciones locales.
A través del Programa de Axudas IA 360, se apoyará a las empresas gallegas para incrementar su productividad mediante el uso diario de tecnologías avanzadas. También se habilitará una línea específica llamada Ticket Innova, dirigida especialmente a pequeñas y medianas empresas menos intensivas en innovación. Para estas ayudas se destinarán 4 millones de euros, con convocatorias programadas para enero próximo.
Apoyo a la investigación e innovación en IA
Finalmente, Rueda subrayó que el Programa contempla medidas para fomentar el talento investigador mediante ayudas pre y postdoctorales, así como apoyo a grupos consolidados e iniciativas dirigidas hacia centros de investigación destacados.
A fin de asegurar una implementación ética y transparente de estas tecnologías, se están creando órganos dedicados al gobierno de la inteligencia artificial en Galicia. Entre ellos destacan la Oficina Galega de IA y el Consello Galego de IA. Se establecerán instrumentos destinados a garantizar un uso responsable e incluirán estudios sobre el impacto social y económico derivado del uso generalizado de esta tecnología.
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