La cuesta de enero ya no será un problema

La temida cuesta de enero ya está aquí y, para muchos, se hará más complicada después de las fiestas familiares, las escapadas y la multitud de regalos que acostumbramos a comprar en los últimos y primeros días del año.

Papá Noel y los Reyes Magos no han hecho sino aumentar el agujero en nuestras cuentas bancarias, y no nos queda otra que pedir ayuda extra para dar ese empujón definitivo y sobrevivir a la cuesta de enero sin que repercuta en los próximos meses. Cada vez son más las personas que acuden a productos financieros innovadores a través de internet, donde se promueve una financiación responsable con préstamos rápidos a corto plazo, de bajo importe y de forma simple y transparente, como es el caso de ‘¡QuéBueno!’.

La cuesta de enero ya no será tan complicada como la que lleva años azuzando a los menos previsores: la cuesta de septiembre. Sí, ese periodo después de vacaciones en tras una escapada más cara de lo normal o aquella comida que salió por un ojo de la cara.

Pero este periodo del año, después de las Navidades, trae otra etapa consigo de bastante peligro: las rebajas. Esas semanas en las que las calles más comerciales de las ciudades y sus respectivos centros comerciales se llenan de gente dispuesta a hacer aún más grande el agujero del que hablábamos anteriormente.

Aquí van algunos consejos para que la cuesta de enero sea más llevadera:

• Cuidado con las tarjetas de crédito: funcionan bien para afrontar gastos imprevistos pero puedes acumular después una deuda mucho mayor. ¿Nuestro consejo? ¡Escóndelas en el cajón y no la saques hasta que tu economía reflote!
• ¡Controla el gasto!: Sí, es un poco tedioso pero si apuntas todos los gastos y limitas un saldo disponible del que restar estas cantidades, serás más consciente de cuál es tu verdadera situación.
• ¡No te quedes con los regalos que no te gustan!: Es época de rebajas y, ¡época de cambios! Puede que el pijama de todos los años no te haga tanta falta como otra prenda que llevas tiempo queriéndote comprar. Olvídate de la vergüenza y consigue ese vale o cupón con el que podrás cambiar por algo que verdaderamente necesites.
• Y por último… ¡Cuidado al hacer la compra!: Es, sin querer, uno de los gastos más abultados del mes. Los supermercados y grandes superficies captan nuestra atención con productos que, en verdad, no necesitamos. Procura hacer una lista y no salir de ella, si no quieres llevarte una sorpresa al llegar a la caja…