Una fuerte y sólida recepción a la la gama de motos Spitfire en el Reino Unido, y un apoyo abrumador por parte de los motoristas en todo el mundo, han impulsado la decisión de exportar las CCM Spitfire a otros mercados internacionales.
En 1971, el entusiasta motociclista Alan Clews originalmente tenía poco interés en ser un fabricante de motocicletas. Trabajando duro durante toda la semana una cadena de quioscos propiedad de la familia de su mujer, esperaba pacientemente a que el llegara el viernes para competir en carreras y triales internacionales durante el fin de semana, siempre seguro de estar de regresar a casa a tiempo para volver a trabajar el lunes por la mañana.
Fue solo cuando la petición de Alan para comprar una moto oficial de BSA fue rechazada que decidió construir su propia moto de competición allá por 1971 en el garaje de su casa. Tal fue el éxito de sus esfuerzos, que las noticias se extendieron como fuego salvaje, y la demanda de sus servicios creció, lo que eventualmente llevó al nacimiento de Clews Competition Machines. Eso fue hace 47 años. Las letras CCM se convertirían más adelante en sinónimo de éxitos internacionales múltiples en motocross, flat-track, triales, pruebas de supermoto y competiciones de carreras en carretera a los más altos niveles.
Desde Entonces hasta hoy, loa aficionados han suspirado por la marca. CCM se diferencia del resto de fabricantes en la forma de vender sus modelos. Directamente y sin intermediarios, cualquier persona puede tomarse una cerveza mientras mira cómo se fabrica a mano su motocicleta. Hasta la fecha, la empresa ha tomado más de 1.200 pedidos de la Spitfire directamente, y esas motocicletas ya pedidas están actualmente en producción.
La marca ha preparado una página web específica que permita a los interesados dejar sus datos para recibir actualizaciones sobre CCM
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