Un programa de mindfulness de ocho semanas mejoró el bienestar laboral y las habilidades cognitivas de maestros en el Camp de Tarragona, según un estudio de la Universidad Rovira i Virgili. Los participantes reportaron mayor satisfacción, reducción de ansiedad y mejoras neuropsicológicas, destacando la importancia de la atención plena en la educación.
El bienestar laboral ha mejorado y las habilidades cognitivas han aumentado. Estas son algunas de las principales consecuencias observadas tras la implementación de un programa de ocho semanas que se centra en el mindfulness o atención plena, dirigido a un centenar de maestros de educación primaria en el Camp de Tarragona. La investigación, liderada por un equipo del Departamento de Psicología de la Universidad Rovira i Virgili (URV), presenta resultados innovadores, especialmente en el ámbito neuropsicológico, un área que ha sido poco explorada hasta ahora y donde se ha evidenciado una mejora notable después de la intervención. Los hallazgos del estudio han sido publicados en la revista Mind, Brain and Education.
Según Lluis Heredia, «el programa no solo elevó los niveles de bienestar laboral, sino que también optimizó las funciones neuropsicológicas de los maestros, un elemento fundamental para alcanzar un rendimiento efectivo en el ámbito educativo». Además, el estudio resalta la relevancia de la plena atención como un facilitador del bienestar de los docentes y, posiblemente, un factor clave para el éxito académico de sus estudiantes.
En el transcurso de la investigación, se eligieron cinco escuelas de primaria, tanto públicas como concertadas, por parte del equipo investigador. En cada uno de estos centros educativos, se establecieron dos grupos: uno de control, que no participó en ningún programa, y otro experimental. “Esto nos permitió controlar muy bien el efecto del contexto de cada escuela y su idiosincrasia, ya que seleccionamos centros muy diferentes unos de otros”, señala Lluís Heredia, científico del centro de investigación Tecnatox de la URV, quien ha estado al frente del estudio.
Durante un período de ocho semanas, se llevaron a cabo sesiones teóricas y prácticas que tenían una duración de dos horas semanales. Estas actividades se centraron en la técnica de mindfulness, que incluye una serie de ejercicios de relajación y meditación. El propósito principal era enfocar la atención en la respiración y en las sensaciones corporales, así como aprender a gestionar esta experiencia interna para mejorar la calidad de vida. El investigador señala: “El objetivo de este trabajo era aprender a regular los estados de ansiedad, trabajar las emociones e incrementar el bienestar personal y colectivo poniendo en práctica ejercicios individuales y en parejas, para fomentar el sentimiento de humanidad compartida, empatía, compasión y reducción de la crítica no constructiva”.
En otro ámbito, se observaron mejoras en el profesorado en áreas neurocognitivas, incluyendo la capacidad de planificación y las habilidades visuoconstructivas. Este grupo mostró resultados superiores en la velocidad de procesamiento al ser comparado con el grupo control. Aunque no se encontraron diferencias significativas entre los grupos, se identificó una tendencia hacia la mejora en otras variables, como la fluidez verbal, tanto en su forma semántica como fonológica.
Los resultados obtenidos tras este proceso indicaron que los maestros involucrados en el programa notaron mejoras notables. En primer lugar, se resaltó un incremento considerable en su bienestar laboral, particularmente en lo que respecta a las relaciones sociales. Además, se observó un aumento en su capacidad para estar presentes en el momento, una reducción en los niveles de ansiedad laboral y una mayor satisfacción con su entorno de trabajo.
El estudio ha contado con la participación del equipo investigador, el cual incluye a Margarita Torrente, David Ventura y Paloma Vicens. Estos investigadores también están vinculados al Departamento de Psicología de la URV.