Con la llegada de la PS5 Pro el 7 de noviembre, los jugadores buscan mejorar el almacenamiento limitado. Kingston destaca la importancia de las SSD con disipadores térmicos para mantener un rendimiento óptimo. Estas unidades permiten disfrutar de juegos sin interrupciones y son esenciales para una experiencia de juego fluida.
Con la llegada inminente de la PS5 Pro, programada para el 7 de noviembre, los jugadores están en busca no solo de un rendimiento superior, sino también de una mejor gestión del espacio de almacenamiento para los juegos más recientes. La capacidad interna de la consola es limitada. Dado que cada vez se lanzan más títulos que ocupan varios gigabytes, esta situación puede transformarse en un inconveniente.
Kingston, conocido por ser un destacado fabricante de productos de memoria y soluciones tecnológicas, resalta la importancia de las unidades SSD para incrementar el almacenamiento interno de la PS5 Pro. Estas unidades, que cuentan con disipadores térmicos, son perfectas para prevenir la pérdida de velocidad ocasionada por el sobrecalentamiento durante periodos de uso intensivo. Por ejemplo, la SSD Kingston FURY Renegade PCIe 4.0 NVMe M.2 está equipada con un disipador térmico que protege contra caídas en el rendimiento, ya que contribuye a la disipación del calor.
Kingston enfatiza la relevancia de las SSD tanto internas como externas, para que los jugadores saquen el máximo provecho de su PS5 Pro:
Para disfrutar de una experiencia de juego excepcional, es fundamental contar con un almacenamiento ampliado.
En comparación con la versión estándar, la PS5 Pro proporciona un almacenamiento interno SSD que puede llegar hasta los 2 TB. Sin embargo, es posible que muchos jugadores llenen rápidamente ese espacio disponible. Por lo tanto, para no tener que estar instalando y desinstalando juegos de manera constante, surge la necesidad de aumentar el almacenamiento interno.
Unidades SSD internas. Los juegos que se encuentran en las unidades internas de la PS5 Pro pueden ser jugados de inmediato, sin necesidad de moverlos a otra unidad. Esto proporciona una experiencia de juego mucho más cómoda y ayuda a disminuir el desgaste de la unidad principal. Sin embargo, dado que los títulos para PS5 pueden ocupar más de cien gigabytes, es esencial que cualquier unidad sea al menos tan rápida como la unidad que ya está instalada. En este contexto, un disipador térmico se vuelve fundamental, ya que puede ser especialmente eficaz para mantener esas velocidades incluso bajo un uso intensivo.
Unidades SSD externas como la XS2000 de Kingston presentan un diseño compacto, ligero y resistente. Estas unidades están disponibles en capacidades que oscilan entre 500 GB y 4 TB. Son ideales para manejar el almacenamiento adicional que pueda necesitarse más allá de la SSD dedicada de la PS5, así como cualquier SSD M.2 secundaria. Con velocidades de lectura y escritura que alcanzan hasta 2.000 MB/s, resultan perfectas para ejecutar juegos de generaciones anteriores de la consola, así como para almacenar música u otros medios en la unidad.
La experiencia de juego fluida en la PS5 Pro depende en gran medida del almacenamiento de alta velocidad. Para asegurar un rendimiento óptimo y prevenir caídas de velocidad durante las exigencias de los juegos, son fundamentales las SSD con disipadores térmicos, como las que ofrece Kingston. Así, los jugadores podrán disfrutar de sus sesiones sin interrupciones ni ralentizaciones”, señala Jordi García, líder del equipo de Iberia en Kingston.
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