Un equipo de investigadores de la Universidad CEU San Pablo, en colaboración con el Hospital Infantil Universitario Niño Jesús y la Universidad Rey Juan Carlos, ha realizado un estudio innovador sobre la obesidad infantil. Este trabajo pionero abre nuevas posibilidades para el desarrollo de estrategias terapéuticas más efectivas y personalizadas para combatir esta enfermedad, especialmente relevante en el contexto del Día Europeo contra la Obesidad que se celebra cada 17 de mayo.
Nuevos hallazgos sobre la obesidad infantil
La obesidad infantil representa un desafío significativo para la salud pública tanto en España como a nivel global. A pesar del creciente reconocimiento del problema por parte de instituciones públicas y privadas, persisten numerosas interrogantes. Los investigadores del Centro de Metabolómica y Bioanálisis (CEMBIO) han aportado un enfoque novedoso al estudiar el origen de esta condición mediante biomarcadores medibles en sangre.
Utilizando técnicas avanzadas de metabolómica y análisis estadístico, han logrado identificar hasta tres subtipos metabólicos de obesidad infantil, conocidos como metabotipos, que no habían sido descritos anteriormente. Según Fco. Javier Rupérez, investigador principal del proyecto, “la selección de los biomarcadores puede ayudar a clasificar el tipo de obesidad y, así, identificar el tratamiento más adecuado para cada caso”.
Colaboración multidisciplinaria y resultados prometedores
Los resultados de este estudio han sido publicados recientemente en la revista Frontiers in Molecular Biosciences. La investigación destaca la importancia de las colaboraciones entre diferentes disciplinas para abordar problemas complejos como la obesidad infantil.
El proyecto ha contado con el apoyo del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, así como del Fondo de Investigación en Salud (FIS) del Instituto de Salud Carlos III. Además, se ha explorado cómo tratamientos nutricionales específicos, como una dieta cetogénica mantenida durante cuatro meses, pueden resultar efectivos para reducir el peso en niños obesos.
Estos avances representan un paso significativo hacia una mejor comprensión y tratamiento de la obesidad infantil, resaltando la necesidad de enfoques personalizados basados en datos científicos rigurosos.