La Universitat de Lleida (UdL)4 hasta el 24 de agosto. Durante este período, todos los edificios, tanto en la capital del Segrià como en el campus Igualada-UdL, tendrán acceso restringido únicamente al personal universitario.
Esta medida se enmarca dentro del Pla d’Estalvi Energètic, que implica el cierre de todas las bibliotecas y salas de estudio. La universidad estima que esta acción permitirá un ahorro aproximado de 72.000 euros en gastos relacionados con electricidad, telefonía y limpieza, entre otros. Narciso Pastor, vicerector de Infraestructuras, ha señalado que esta cifra es ligeramente superior a la del año anterior debido al aumento en el precio de la electricidad.
Ahorro energético y medidas sostenibles
El objetivo principal detrás de estas decisiones es fomentar un uso más eficiente de los recursos energéticos en la institución. La UdL se une así a otras universidades que han implementado estrategias similares para reducir su huella ecológica y contribuir a la sostenibilidad.
Con estas acciones, la UdL no solo busca optimizar sus gastos operativos, sino también promover una conciencia ambiental entre su comunidad educativa. Se espera que estas iniciativas sean bien recibidas por los estudiantes y el personal académico, quienes valoran cada vez más la importancia de cuidar el medio ambiente.