El yacimiento de Casas del Turuñuelo, situado en Guareña (Badajoz), ha vuelto a sorprender al mundo arqueológico con un descubrimiento significativo. Un equipo del Instituto de Arqueología de Mérida (IAM, CSIC-Junta de Extremadura) ha desenterrado lo que se considera el altar de mármol griego más antiguo del Mediterráneo occidental, datado en el siglo V a.C.
Entre los hallazgos recientes, que incluyen copas y cerámicas, destaca una columna de mármol que proviene de una cantera griega. Según la investigadora Anna Gutiérrez del Instituto Catalán de Arqueología Clásica (ICAC), el material es originario de la isla de Mármara, en Asia Menor. Sin embargo, se espera que análisis arqueométricos futuros confirmen la localización exacta de la cantera. Los expertos sugieren que esta pieza podría haber sido parte de un altar, similar a otros encontrados en la región mediterránea.
Un hallazgo único en el contexto mediterráneo
Los investigadores Esther Rodríguez González y Sebastián Celestino Pérez han destacado que, aunque existen otras piezas similares en el Mediterráneo, como las descubiertas en Ampurias (Gerona), este altar es único por su procedencia asiática. La datación del hallazgo coincide con un periodo rico en intercambios comerciales entre culturas, lo que subraya la importancia del yacimiento durante la época tartésica.
La presencia de esta columna no solo resalta el valor artístico del objeto, sino también su relevancia histórica. Su ubicación dentro del yacimiento indica que Casas del Turuñuelo fue un punto clave para las actividades comerciales y rituales en el interior de la península ibérica.
Avances en las excavaciones
La VII campaña de excavaciones ha permitido descubrir nuevas estancias vinculadas a actividades productivas, así como una impresionante obra hidráulica destinada a la canalización de agua. Este sistema presenta casi un metro de altura y está construido con grandes piedras, evidenciando los avanzados conocimientos técnicos de sus constructores.
Aparte de los hallazgos arquitectónicos, se han recuperado objetos metálicos significativos, incluyendo jarros y broches tartésicos. Estos descubrimientos refuerzan la idea de que Casas del Turuñuelo fue un centro neurálgico para diversas actividades económicas y rituales.
Un legado arqueológico invaluable
Desde 2015, el equipo investigador ha llevado a cabo siete campañas en este enclave arqueológico, logrando documentar técnicas constructivas únicas. Entre sus hallazgos más notables se encuentra un sacrificio masivo de animales y las primeras representaciones humanas asociadas a la cultura tartésica.
El proyecto "Construyendo Tarteso", impulsado por la Agencia Estatal de Investigación dentro del Plan Estatal I+D+i, busca profundizar en el conocimiento sobre esta cultura a través del análisis arquitectónico. El IAM se compromete a promover investigaciones sobre el patrimonio arqueológico tanto regional como internacionalmente.