Emprender un negocio o desarrollar un proyecto profesional puede ser un camino lleno de desafíos. Cuando la persona que se plantea esta opción tiene una discapacidad, los obstáculos se multiplican considerablemente. Esta realidad es conocida por Monsé Reyes, fundadora de Monsegur, una compañía dedicada a ofrecer seguros y consultoría a personas con discapacidad y colectivos en riesgo de discriminación. Reyes afirma: «El ecosistema emprendedor no está pensado para nosotros. Las ayudas y subvenciones son difíciles de conseguir y no contemplan las adaptaciones necesarias, además de que los bancos suelen mostrar recelo ante una solicitud de financiación por parte de alguien con discapacidad».
Reyes colabora con el IN-LAB, un laboratorio impulsado por Marta López Costa, profesora en los Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC). Este espacio busca promover proyectos liderados por personas con discapacidad física e intelectual, creando una red comunitaria que facilite el emprendimiento inclusivo. Según López Costa, «aunque existen iniciativas para fomentar el emprendimiento, muchas veces no consideran las necesidades específicas de las personas con discapacidad».
La colaboración del IN-LAB y sus objetivos
El IN-LAB combina el conocimiento sobre inclusión laboral proporcionado por la UOC con la experiencia en emprendimiento del TecnoCampus, asociado al proyecto. Además, cuenta con la colaboración de diversas entidades como la Fundación ONCE, la Fundación Prevent y otras organizaciones dedicadas a la inclusión. Este laboratorio está subvencionado por el Departamento de Investigación y Universidades, recibiendo apoyo financiero para proyectos con impacto social.
Una de las primeras actividades del IN-LAB será la Jornada de Emprendimiento IN-LAB, programada para el 4 de abril en el auditorio del campus Poblenou de la UOC en Barcelona. Este evento tiene como objetivo compartir conocimientos científicos y experiencias sobre los retos que enfrentan los emprendedores con discapacidades. Expertos en innovación participarán en esta jornada, presentando casos exitosos como Specialisterne, que emplea a profesionales neurodivergentes, y Batec Mobility, especializada en soluciones de movilidad.
Fomentar empleo y crear referentes sociales
La falta de adaptación del mercado laboral a la diversidad limita las oportunidades laborales para las personas con discapacidad. Por ello, emprender se convierte a menudo en una necesidad. Montserrat Reyes señala: «Cuando el mercado laboral no brinda opciones adecuadas, crear nuestro propio espacio se vuelve esencial». Los proyectos impulsados por este colectivo no solo generan empleo sino que también crean referentes que demuestran que romper barreras es posible.
A través del IN-LAB, se busca empoderar a estas personas para que puedan generar sus propias iniciativas empresariales. La creación de empresas inclusivas también permite ofrecer oportunidades a otros miembros del colectivo que podrían enfrentar dificultades para acceder al mercado laboral convencional.
Hackatón del IN-LAB: Innovación inclusiva
Otra iniciativa destacada del IN-LAB será un hackatón, programado para octubre, donde diversas empresas plantearán retos a equipos multidisciplinarios para desarrollar soluciones inclusivas. Los proyectos serán evaluados por un jurado especializado, y los cuatro mejores recibirán apoyo económico o recursos valiosos para validar e implementar su modelo de negocio durante un año en la incubadora del TecnoCampus.
Esta investigación contribuye a los objetivos de desarrollo sostenible 8 (trabajo digno y crecimiento económico) y 10 (reducción de desigualdades).