La presidenta del Consejo Social de la UPV, Mónica Bragado, hace un balance tras doce años en el cargo
Mónica Bragado, quien asumió la presidencia del Consejo Social de la Universitat Politècnica de València (UPV) en julio de 2013, se ha convertido en un referente en el ámbito educativo y social. Durante su mandato, ha liderado iniciativas innovadoras como un fondo de inversión para proyectos tecnológicos y la Oficina de Mecenazgo, que canaliza capital privado hacia la universidad.
Bragado, ingeniera industrial por la UPV, destaca su orgullo por haber impulsado programas como UP! Steam, que promueve las STEM entre las niñas. Este proyecto ha alcanzado su sexta edición y busca cerrar la brecha de género en campos tradicionalmente masculinos.
Un legado marcado por la innovación y el compromiso social
A lo largo de su gestión, Bragado ha enfrentado desafíos significativos, incluyendo momentos trágicos como las muertes de Miguel Burdeos y Juan López Trigo. Sin embargo, también ha celebrado logros notables, como el establecimiento de la Cátedra Líderes, enfocada en facilitar la inserción laboral de los estudiantes.
Con más de 30 años de experiencia en el sector industrial y actualmente directora de Desarrollo de Negocio para Europa en Celestica, Bragado se prepara para dejar su cargo en septiembre. Aunque finalizará su etapa al frente del Consejo Social, ya tiene planes para un nuevo proyecto al que dedicará su energía.
El futuro del Consejo Social de la UPV
El pleno de les Corts Valencianes, previsto para septiembre, será el encargado de nombrar a su sucesor. La propuesta será presentada por el president de la Generalitat tras consultar con el rector de la UPV.
Bragado deja una huella imborrable en el Consejo Social, donde ha demostrado que es posible innovar y fomentar el compromiso social desde una institución educativa.
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