Un estudio reciente realizado por la catedrática de Periodismo de la Universitat de València, Carolina Moreno-Castro, pone de manifiesto el papel crucial que desempeñan los medios de comunicación en situaciones de emergencia. Publicado en la revista Estudios sobre el Mensaje Periodístico, este análisis examina cómo se cubrió la dana que afectó a Valencia, destacando aspectos como la claridad, rapidez y neutralidad en la información proporcionada.
El trabajo forma parte de los proyectos europeos COALESCE e IBERIFIER Plus, que cuentan con un presupuesto total de más de 4 millones de euros. Ambos proyectos tienen como objetivo principal estudiar la comunicación en contextos de riesgo y emergencias, así como abordar el fenómeno de la desinformación.
La función del periodismo en emergencias naturales
Según Carolina Moreno, “la prensa cumplió un rol clave de servicio público y apoyó la resiliencia ciudadana”. Sin embargo, también señala que las limitaciones en la acción institucional y la dependencia de fuentes externas evidencian que, aunque necesaria, la comunicación mediática no es suficiente para prevenir daños durante emergencias naturales.
El análisis revela patrones significativos en la cobertura informativa del día en que ocurrió la dana. Los titulares se centraron en términos como “dana”, “inundaciones” y “alerta roja”, lo cual permitió transmitir rápidamente la magnitud del riesgo. Además, los medios adoptaron un enfoque proactivo al ofrecer información basada en evidencia científica desde primera hora, incluyendo contenidos generados por ciudadanos que aumentaron el impacto visual y facilitaron una mejor comprensión de la situación.
Neutralidad editorial y efectividad informativa
Otro hallazgo importante del estudio es la notable neutralidad editorial. Todos los medios coincidieron en emitir un mensaje de alerta unificado, lo que resalta cómo el periodismo puede actuar como un servicio público eficaz ante situaciones extremas. “La cobertura fue clara y precisa, libre de sesgos ideológicos”, afirma Moreno, quien destaca que esta labor informativa ayudó a mantener a la población al tanto del desastre antes incluso de que se produjeran víctimas mortales o daños significativos.
A pesar de esto, se observó una tardanza en el envío de alertas oficiales por parte de la Generalitat Valenciana; estas no llegaron a los móviles hasta las 20:11 horas, momento en el cual muchas áreas ya estaban inundadas. En contraste, los medios habían advertido sobre el riesgo meteorológico al menos 72 horas antes y ofrecieron cobertura continua desde la mañana del 29 de octubre.
Análisis detallado del estudio
El estudio analizó exhaustivamente las noticias publicadas sobre la dana durante todo el 29 de octubre utilizando tres bases de datos (FACTIVA, NEXIS y MyNews). Se identificaron cientos de artículos nacionales que citaban principalmente a la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) y a la Generalitat Valenciana como fuentes principales. Este contraste entre las acciones tardías del sistema oficial y el trabajo anticipatorio e informativo realizado por los medios subraya su importancia durante crisis similares.
Moreno concluye enfatizando que “los medios actúan como amplificadores clave” durante crisis. Su especialización y coordinación con autoridades son esenciales para garantizar que la información sea oportuna y comprensible. El estudio aboga por reforzar protocolos comunicativos y fomentar un periodismo basado en rigor y utilidad pública. “Informar adecuadamente durante una dana no es solo cuestión de rapidez; una información clara puede salvar vidas”, finaliza Carolina Moreno.