Un estudio internacional ha revelado que los primeros oasis de oxígeno en la Tierra se formaron hace casi 3.000 millones de años gracias al reciclaje intensivo de fósforo marino. Esta investigación, liderada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha sido publicada en la prestigiosa revista Nature Geoscience y promete revolucionar nuestra comprensión sobre la evolución de la vida en el planeta.
Aunque ya se conocía la existencia de estos oasis marinos, que surgieron mucho antes de que la atmósfera terrestre se oxigenara, el equipo encabezado por la científica del CSIC, Fuencisla Cañadas, ha identificado las condiciones geoquímicas que facilitaron su formación. “Lo emocionante es que hemos descubierto cómo el reciclaje de fósforo actuó como un catalizador para que la vida pudiera modificar su entorno”, afirma Cañadas, quien también es investigadora del Marie Sk?odowska-Curie” del CAB.
Implicaciones para la astrobiología
Este hallazgo tiene importantes repercusiones para el campo de la astrobiología. “Si pueden existir zonas ricas en oxígeno en ambientes globalmente anóxicos, debemos reconsiderar nuestras estrategias para buscar señales de vida en otros planetas”, explica Cañadas. “Las biofirmas podrían ser sutiles y efímeras, lo cual debería influir en cómo llevamos a cabo nuestras exploraciones”, añade.
El equipo investigador, compuesto por expertos de España, Francia, Canadá y el Reino Unido, analizó un testigo de perforación de 2.930 millones de años procedente del área de Red Lake, Ontario. Este testigo proviene de una plataforma marina carbonatada antigua y contiene valiosas firmas geoquímicas del Eón Arcaico, cuando los océanos eran predominantemente anóxicos y ricos en hierro.
Evidencias de vida primitiva
Los sedimentos estudiados también incluyen estromatolitos, estructuras formadas por microorganismos primitivos como las cianobacterias. Estas evidencias son algunas de las más antiguas que atestiguan la existencia de vida en nuestro planeta.
A través de técnicas avanzadas, los investigadores lograron reconstruir las condiciones ambientales y la dinámica nutricional del sistema marino antiguo. Los resultados indican que el fósforo fue reciclado intermitentemente desde los sedimentos hacia la columna de agua durante períodos con altos niveles de hierro y sulfuros.
Un papel crucial en la evolución terrestre
A pesar de que el oxígeno generado en estos oasis no se acumuló en la atmósfera, este estudio proporciona una visión fundamental sobre cómo la Tierra pasó lentamente a ser un planeta capaz de albergar vida compleja. “Estos oasis fueron pequeños y efímeros, pero tuvieron un impacto esencial en los sistemas biogeoquímicos previos a la gran oxidación atmosférica”, concluye Cañadas.
Esta investigación marca un avance significativo al ofrecer una reconstrucción detallada del reciclaje nutricional en uno de los oasis más antiguos conocidos. Combina sedimentología, biogeoquímica y modelización redox para abordar cuestiones clave sobre los primeros entornos terrestres. “Hemos abierto una nueva ventana al océano arcaico”, destaca Cañadas.
Financiación: Este proyecto ha sido respaldado por varias ayudas internacionales incluyendo acciones Marie Sk?odowska-Curie y contratos del Consejo Europeo de Investigación.