El acoso escolar afecta a 7 de cada 10 niños globalmente, siendo España el país con más casos (80%). En el Día Internacional contra el Acoso Escolar, expertos destacan la importancia de detectar síntomas físicos y emocionales. Se recomienda crear espacios seguros, mantener comunicación abierta y buscar apoyo profesional para prevenir complicaciones.
Según la ONG internacional Bullying sin Fronteras, el acoso y el ciberacoso afectan a 7 de cada 10 niños en todo el mundo a diario. En este contexto, España se posiciona como el país con la mayor cantidad de casos de acoso, con un alarmante 80% de los menores españoles sufriendo bullying. Por esta razón, en el marco del Día Internacional contra el Acoso Escolar, que se conmemora cada 2 de mayo, el departamento de pediatría del Hospital CIMA de Sanitas en Barcelona enfatiza la importancia de implementar medidas efectivas para proteger la salud mental y física de los niños que enfrentan estas situaciones.
“El sufrimiento interno puede manifestarse en problemas físicos cuando alcanza un estado grave”, señala Nelly Padilla, pediatra del Hospital CIMA. “Es crucial que padres y tutores reconozcan algunos síntomas comunes para actuar oportunamente, prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida del menor”. Entre las principales señales que menciona la pediatra se encuentran:
- Dolores abdominales recurrentes, náuseas y trastornos digestivos.
- Insomnio o interrupciones frecuentes durante la noche, afectando el descanso y la recuperación física.
- Dolores musculares y cefaleas recurrentes debido a la tensión emocional.
- Problemas alimenticios, como anorexia o bulimia, provocados por la presión social y el impacto del acoso en la autoestima.
- Alteración en la capacidad del organismo para combatir infecciones debido al estrés prolongado.
Para fomentar el bienestar infantil, Delia García, psicóloga Blua de Sanitas, aconseja a los cuidadores: “Es fundamental hablar con ellos y con el colegio ante cualquier síntoma de malestar para detener a tiempo la situación antes de que evolucione hacia problemas físicos o mentales más graves”. Algunos consejos que sugiere implementar en casa incluyen:
- Crear un espacio seguro: Crear un ambiente donde el menor pueda expresarse libremente sin temor a ser juzgado.
- Mantener una comunicación abierta: Los niños deben sentir que son escuchados y apoyados por sus padres, quienes son su principal pilar.
- Cercanía con la escuela: Estar en contacto constante con el colegio para conocer las actividades y programas implementados puede ayudar a prevenir casos de acoso.
- Fomentar actividades deportivas: El deporte permite a los niños canalizar emociones y preocupaciones relacionadas con esta problemática.
- Establecer rutinas saludables: Tener horarios definidos para comer, dormir, estudiar y hacer ejercicio favorece tanto la organización como el bienestar físico y mental.
- Buscar apoyo profesional: Si es necesario, contar con ayuda emocional puede marcar una diferencia significativa en la vida del menor, ayudándole a gestionar sus sentimientos desde una edad temprana.
La comunidad educativa y las administraciones públicas deben priorizar el bienestar emocional de los niños para evitar situaciones de acoso escolar, crear entornos seguros y ofrecer apoyo especializado. En este sentido, Delia García afirma que “la atención temprana y el acompañamiento son fundamentales especialmente para aquellos menores que padecen acoso escolar”.