Menos impuestos y más espacio en la educación para la creatividad

“Son muchos los mitos que debemos romper —comentó Javier Santiso, vicepresidente de ESADEgeo—. Por ejemplo, existe la creencia de que nuestras compañías no son competitivas, pero ahí tenemos a Amadeus, que es líder de reservas aéreas, o a Iberdrola, que tiene la mayor planta termosolar del mundo”. “También se dice que nuestros profesionales no son competitivos a escala internacional, cuando tenemos a españoles en las principales empresas del planeta; o que en España no se arriesga, aunque tengamos ejemplos de compañías que cotizan en bolsas internacionales o que son partners de gigantes de las telecomunicaciones”, añadió al tiempo que recordaba a los asistentes que nuestro país es uno los principales receptores de talento en Europa : “Tenemos tres business schools entre las diez mejores escuelas del mundo y recibimos el doble de estudiantes extranjeros que Stanford o el MIT”. “De hecho, existe un repunte de esta actividad no observado en otros países con problemas similares al nuestro”, concluyó en su intervención.

Dicho repunte es consecuencia, entre otros factores, del aumento en el número de start ups que comienzan su andadura en nuestro país y que, como quiso demostrar el vicepresidente de ESADEgeo, no tienen género ni edad. Dos aspectos que se trataron en sendas mesas redondas durante la jornada —“La mujer si emprende” y “La edad no importa”— y en la que se abordaron numerosos casos de éxito.

La mujer sí emprende

La principal conclusión del primer panel de emprendedoras de la última jornada de Start Up Spain se centró en la dureza de sus comienzos y la necesidad de reinventarse constantemente y ampliar horizontes a escala internacional. “Al principio mi madre fue la única que creyó en mí —reconoció Catalina Hoffman, fundadora y CEO de Vitalia—, pero luego demostré que podía hacerlo”. Muy similar a la experiencia de Marta Esteve, fundadora de Rentalia y cofundadora de Top Rural, para quien los inicios “fueron apasionantes pero muy duros; si chocas con la pared tienes que buscar las esquinas y seguir”. Sin embargo, en opinión de Noelia Amoedo, CEO de Media Smart, muchas de las barreras para emprender “nos las ponemos nosotros mismos”. “Caer está permitido, levantarse es obligatorio”, insistió por su parte Belén Barbero, fundadora de Beba’s Closet.

“Toda empresa tiene momentos buenos y momentos malos, pero llega un día en el que toca dar el salto internacional”, prosiguió Pilar Manchón fundadora y CEO de Indisys, empresa participada por, entre otras Intel Capital. Y de seguir emprendiendo, como es el caso de Elena Gómez Pozuelo, presidenta de Adigital y cofundadora, entre otras de Womenalia: “Emprender es algo apasionante y cuando te toca no puedes dejarlo. Yo ya voy por mi séptimo proyecto”. “Emprender se hace de manera inconsciente, como todo lo importante que se hace en la vida”, resumió Alicia Asín, cofundadora y CEO de Libelium.

La edad no importa

La segunda mesa redonda, titulada “La edad no importa”, reunió a emprendedores sénior y júnior con la intención de analizar la diferencias que se producen en el emprendimiento en diferentes momentos de la vida. Sin embargo, según Ignacio Benito, CEO y cofundador de Ingenium, “desgraciadamente, no es mucha”. “En cualquier caso es muy sacrificado, pero merece la pena”, reconoció Óscar Pérez, cofundador de Medical Stay para quien, además, “el Gobierno apenas da las facilidades que hay en otros países para empreder”. Sin embargo, sí que hay una gran diferencia en las circunstancias que llevan a la creación de empresas, como reconoció el tercer invitado sénior, Albert Martí, cofundador y CEO de Bananity: “Nosotros necesitábamos que nos dieran un empujón como, en mi caso, que fue que vendieran mi empresa”.

En el lado de los más jóvenes, las dificultades principales venían más por la edad: “Me decían que fuera con mi padre”, comentó Luis Iván Cuende, CEO de Asturix, quien a los 18 años obtuvo el título de mejor hacker de Europa. Y, cómo no, por el objetivo: disfrutar. “Yo emprendo para buscar soluciones, no para ganar dinero; aunque al inversor no se le pueda decir esto desde el principio”, reconoció Pep Gómez, fundador y CEO de Fever, y uno de los ganadores del premio Inspiring Young Entrepeneurs de ESADE.

Por último, los invitados coincidieron de nuevo en la necesidad de un mayor apoyo del gobierno: “No tener que adelantar el IVA antes de vender el producto”, pidió Javier Agüera, CTO y cofundador de Geeksphone; “Dar ayudas al sistema educativo para que no sea una lastre en la creatividad”, recordó Luis Iván Cuende; y “menos impuestos”, como comentó Pep Gómez. “No puede ser que, con seis trabajadores, pague lo mismo por empleado a la Seguridad Social que Repsol”, concluyó Nieves Fernández, fundadora y CEO de Familia Fácil.