Un equipo de investigación conformado por miembros del Grupo de Investigación en Geología Aplicada y Ambiental (GAiA-Geocamb) de la Universidad de Girona (UdG) y del Grupo de Investigación en Riesgos Naturales (RISKNAT) de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), ha desvelado una historia geológica singular y compleja en el origen de las basses de l’Albera.
A través de avanzadas técnicas de geofísica, específicamente la tomografía de resistividad eléctrica (ERT), los investigadores han determinado que estas basses están interconectadas con zonas profundas compuestas por granito alterado, alcanzando profundidades de hasta 170 metros. Este hallazgo es significativo, ya que indica que su formación está relacionada con fracturas y puntos termales activos, lo que sugiere un proceso hipogénico, donde el agua caliente asciende desde el interior terrestre.
Un nuevo enfoque sobre la formación geológica
Hasta ahora, se había asumido que las basses se formaron únicamente a partir de la acción superficial del agua. Sin embargo, este estudio ofrece una perspectiva innovadora sobre la evolución del paisaje granítico. El proyecto está financiado a través del programa estatal AquiPondSys (PID2023-147186OB-100) con fondos FEDER+, y tiene como objetivo abrir nuevas líneas de investigación para comprender mejor la formación, dinámica hidrogeológica y funcionamiento ecológico de estas formaciones acuáticas.
Para aquellos interesados en profundizar en los detalles del estudio, se puede consultar el artículo completo a través de este enlace.
Implicaciones para la investigación futura
El descubrimiento realizado por el equipo no solo resalta la singularidad geológica de las basses, sino que también plantea preguntas importantes sobre los procesos naturales que afectan a esta región. La conexión entre las aguas superficiales y las dinámicas subterráneas podría tener implicaciones significativas para estudios futuros relacionados con los recursos hídricos y la gestión ambiental.
Este tipo de investigaciones son cruciales para entender cómo interactúan los diferentes elementos del medio ambiente y cómo pueden influir en el cambio climático y otros fenómenos naturales. La colaboración entre instituciones académicas refuerza la importancia del trabajo conjunto en la ciencia para abordar retos complejos.