Veinticinco universidades europeas lanzan la Red Europea sobre Educación en Salud y Clima (ENCHE) para capacitar a más de 10,000 estudiantes de medicina en el impacto del cambio climático en la salud. La iniciativa busca integrar contenidos sobre climatología y salud en los programas académicos, promoviendo una atención sanitaria sostenible.
Debido a que Europa experimentó el verano más cálido de su historia, hoy se lanza una red por parte de veinticinco universidades europeas. Esta iniciativa tiene como finalidad proporcionar a más de 10.000 estudiantes de medicina las habilidades y conocimientos necesarios para enfrentar el impacto del cambio climático en la salud humana, así como para ofrecer una atención sanitaria que sea más sostenible.
La Red Europea sobre Educación en Salud y Clima (ENCHE) ha sido establecida por las principales facultades de medicina de países como Bélgica, Francia, Alemania, Irlanda, Italia, Polonia, Portugal, Eslovenia, Suecia, España, Suiza y el Reino Unido. Esta red tiene como objetivo la incorporación de contenidos relacionados con la climatología y la salud en los programas académicos. De esta manera, se busca que los estudiantes de medicina adquieran las habilidades necesarias para identificar, prevenir y abordar el impacto creciente de la crisis climática en la salud pública, además de fomentar una atención sanitaria más sostenible.
Uno de los mayores desafíos que enfrentamos en la actualidad es el cambio climático, el cual ejerce una presión aún mayor sobre los sistemas de salud, que ya se encuentran al límite. Factores como las temperaturas extremas y la contaminación del aire agravan las condiciones de salud, incluyendo enfermedades infecciosas y crónicas. Entre estas se encuentran las enfermedades de transmisión vectorial, el cáncer, las enfermedades cardiovasculares, las enfermedades respiratorias crónicas y también los trastornos mentales.
Además, el sector de la salud juega un papel en esta crisis climática, ya que aproximadamente un 5% de los gases de efecto invernadero son generados por actividades relacionadas con la sanidad.
De acuerdo con la OMS, un asombroso 99% de la población mundial está expuesta a aire contaminado, lo que resulta en la trágica pérdida de 7 millones de vidas cada año debido a la contaminación del aire. Además, se estima que las muertes relacionadas con el calor podrían aumentar hasta tres veces para el año 2050 si no se toman medidas urgentes.
Las personas más vulnerables, que incluyen a niños, ancianos, individuos de comunidades marginadas y aquellos que ya sufren de otras enfermedades, son las que enfrentan un impacto desproporcionado.
Asimismo, el efecto del cambio climático sobre las infraestructuras sanitarias complica el acceso a la atención médica para la población en todo el mundo.
Asimismo, el apoyo de las principales organizaciones sanitarias estará presente en esta Red, incluyendo a AstraZeneca, Sanitas (a través de su matriz Bupa), GSK, Novartis, Novo Nordisk, Roche, Sanofi y la OMS. Estos organismos forman parte del Grupo de Trabajo de Sistemas Sanitarios dentro de la Iniciativa de Mercados Sostenibles, una colaboración entre el sector público y privado que reúne a directores generales y líderes de empresas farmacéuticas y sanitarias a nivel global. Su compromiso radica en acelerar la descarbonización de los sistemas sanitarios.
En la actualidad, la enseñanza sobre la interconexión entre la climatología y la salud no se incluye de manera consistente en los estudios relacionados con la medicina. A menudo, esta formación depende del conocimiento individual de los docentes y del compromiso mostrado por los grupos de estudiantes. Por esta razón, la ambición de esta Red es proporcionar una formación óptima en conocimientos y competencias dentro de los programas de pregrado, con el objetivo de enfrentar las futuras amenazas que el cambio climático representa para la salud. Además, se anticipa que en el futuro, la Red podría expandirse para alcanzar a otros profesionales sanitarios y establecer asociaciones con diferentes regiones, con el fin de fomentar la resiliencia climática en el sistema sanitario.
La Universidad de Glasgow ejercerá la presidencia de la Red, que se establecerá como un centro regional del Consorcio Mundial de Educación sobre el Clima y la Salud (GCCHE) en la Escuela de Salud Pública Mailman de la Universidad de Columbia. La Red contará con el apoyo del GCCHE, que proporcionará su conocimiento y asesoría, además de fomentar la cooperación transatlántica en el ámbito de la educación relacionada con el clima y la salud. Durante sus primeros tres años, esta Red Europea tiene como objetivo capacitar a un mínimo de 10.000 estudiantes de las universidades involucradas, utilizando los recursos educativos y científicos más avanzados, e inspirar a otros a sumarse a esta colaboración.
El director general de la Organización Mundial de la Salud, Dr. Tedros Ghebreyesus, afirmó: “las repercusiones sanitarias del cambio climático no son amenazas hipotéticas en el futuro; están aquí y ahora. La OMS está ayudando a los países a crear sistemas de salud resistentes al cambio climático y respetuosos con el clima, lo que incluye dotar al personal sanitario de las competencias necesarias para hacer frente a este importante reto de salud pública. Acojo con satisfacción la colaboración público-privada que ha ayudado a impulsar esta nueva red educativa, y espero que inspire la adopción de medidas en otros países y regiones de todo el mundo”.
En la actualidad, las consecuencias para la salud derivadas del cambio climático ya se manifiestan, según lo indicado por el Dr. Tedros Ghebreyesus. La OMS se encuentra trabajando junto a diversas naciones para establecer sistemas de salud que sean tanto resilientes como sostenibles ante estos desafíos climáticos. Además, es fundamental capacitar al personal médico con las habilidades adecuadas para enfrentar esta significativa problemática de salud pública.
El Dr. Ghebreyesus también expresó su entusiasmo por la colaboración entre el sector público y privado, la cual ha sido crucial para desarrollar esta nueva red educativa. Su esperanza es que este esfuerzo motive a otros países y regiones a tomar acciones decisivas en respuesta a estos retos globales.
La profesora asociada Cecilia Sorenson MD, quien es la directora del Consorcio Global sobre Educación en Clima y Salud de la Universidad de Columbia, declaró: “El cambio climático va a impactar en todos nosotros, en todas partes, pero no igual ni de la misma manera. Las redes regionales son necesarias para ayudar a los profesionales de la salud a prevenir y responder a los retos climáticos y sanitarios que son propios en las comunidades donde ejercen, teniendo en cuenta al mismo tiempo las cuestiones culturales y sociales particulares. ENCHE proporcionará a los educadores de toda Europa los recursos necesarios para crear un personal sanitario preparado para el cambio climático”.
Según Sorenson, el impacto del cambio climático afectará a cada individuo y lugar, aunque de formas diversas. Para enfrentar estos desafíos específicos que enfrentan las comunidades, se requieren redes regionales que apoyen a los profesionales de la salud en su labor de prevención y respuesta. Además, es fundamental considerar las particularidades culturales y sociales de cada entorno. La iniciativa ENCHE se encargará de dotar a los educadores europeos con las herramientas necesarias para formar un personal sanitario capacitado ante el cambio climático.
Desde la Universidad de Barcelona, se señala que: "El desafío del cambio climático no solo transforma nuestro entorno, sino que también redefine cómo entendemos y practicamos la medicina. En la Universidad de Barcelona estamos entusiasmados con la creación de la ENCHE, que nos permitirá innovar en la formación médica, incorporando una perspectiva holística que conecte la salud y el medio ambiente. Nuestro objetivo es preparar a los futuros médicos para que no solo reaccionen a las crisis sanitarias, sino que también se conviertan en agentes de cambio en la lucha por un sistema de salud más sostenible y resiliente."
La creación de la ENCHE representa una oportunidad emocionante para transformar la educación médica, integrando aspectos relacionados con el medio ambiente y la salud. Este enfoque busca capacitar a los profesionales del futuro para enfrentar no solo las emergencias sanitarias, sino también para ser proactivos en la construcción de un sistema de salud más fuerte y adaptable.
Emma Walmsley, quien ocupa el cargo de CEO en GSK, comentó: “La ciencia es clara: el cambio climático tiene un impacto directo en la salud humana. Por eso, líderes sanitarios de los sectores público y privado se han unido para apoyar esta nueva red transformadora, equipando a los expertos de la atención de los pacientes de las competencias necesarias para hacer frente a los efectos del cambio climático en la salud”.
El rector de la Universidad de Pavía, Profesor Francesco Svelto, ha expresado: “Como miembro del Grupo de Trabajo del Sistema Sanitario de la Iniciativa de Mercados Sostenibles, me inspira que las principales facultades de medicina europeas se unan a los líderes sanitarios mundiales para abordar los retos interconectados del clima y la salud a los que nos enfrentamos. Trabajando juntos más allá de las fronteras, podemos crear soluciones conjuntas para mejorar la salud de las personas y del planeta”.
Iñaki Peralta, el consejero delegado de Sanitas, ha afirmado: “Como compañía especializada en atención sanitaria, somos conscientes del enorme impacto del entorno y de los factores ambientales sobre la salud de las personas. Esto unido a nuestro compromiso con la formación de futuros profesionales sanitarios, nos anima a apoyar la creación de la red ENCHE, con la que queremos contribuir a dotar a la próxima generación de médicos de la formación necesaria para abordar los retos asistenciales a los que nos enfrentamos”.
La importancia del entorno y los factores ambientales en la salud es reconocida por Sanitas, una empresa dedicada a la atención sanitaria. Este reconocimiento, junto con su dedicación a formar a los futuros profesionales del sector, impulsa su apoyo hacia la iniciativa de crear la red ENCHE. A través de esta red, buscan equipar a los nuevos médicos con las herramientas educativas necesarias para enfrentar los desafíos en el ámbito asistencial.
Pascal Soriot, CEO en AstraZeneca y preside el Grupo de Trabajo de Sistemas de Salud de la Iniciativa de Mercados Sostenibles, expresó: “La emergencia climática es la mayor emergencia de salud en nuestro tiempo, y los profesionales sanitarios están en primera línea para lidiar con los crecientes impactos del cambio climático en la salud. Esta pionera red se asegurará de que la próxima generación de doctores esté equipada para responder a las cambiantes necesidades de salud de la población y ofrezca una atención sanitaria más sostenible a sus pacientes”.
Vas Narasimhan, el CEO de Novartis, afirmó: “La salud humana y la salud planetaria están estrechamente vinculadas. Esta nueva red supone una oportunidad prometedora para equipar a las futuras generaciones de profesionales sanitarios de los conocimientos y las competencias necesarias para adaptarse a las repercusiones del cambio climático en la salud. Juntos debemos responder a los retos del cambio climático de hoy y de mañana para un futuro más sano para todos”.
Según su declaración, Narasimhan destaca la interconexión entre la salud de las personas y la del planeta, enfatizando que es crucial preparar a los nuevos profesionales de la salud con las habilidades adecuadas para enfrentar los desafíos que el cambio climático presenta.
Paul Hudson, el CEO de Sanofi, expresó: “Los estudiantes en las escuelas de medicina que se han unido a esta red son los líderes de la salud del futuro. Con el conocimiento para tratar los efectos de la crisis climática y brindar una atención sanitaria más sostenible, pueden impactar de manera positiva en miles de pacientes, en sus sistemas sanitarios y en el planeta”. Según su perspectiva, estos futuros médicos poseen las herramientas necesarias para abordar los desafíos que plantea el cambio climático en el ámbito de la salud.
Se realiza un llamado a otras universidades en toda Europa por parte de la Red, instándolas a comprometerse con la formación de la futura generación de doctores en el ámbito de la interconexión entre la climatología y la salud.