La percepción de no merecer los logros alcanzados y el temor a ser descubierto como un «fraude» no es exclusiva de aquellos que se consideran altamente capaces o exitosos. Recientes investigaciones publicadas en la revista Springer revelan que esta inquietud ha cobrado una notable prevalencia, afectando tanto al ámbito laboral como a la salud mental de los individuos. Expertos de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) han analizado este fenómeno, que, según datos de Psychology Today, afecta al 70 % de los profesionales al menos una vez en su vida.
La profesora colaboradora de los Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación en la UOC, Mireia Cabero, señala que la ansiedad por estar sobrepagado no es un término técnico reconocido en el campo de la psicología organizacional, ni se refiere a un diagnóstico oficial. Según Cabero, «es una experiencia psicológica que puede manifestarse en el síndrome del impostor», el cual, aunque carece de un diagnóstico formal, presenta una clínica significativa y también se observa en trastornos de ansiedad generalizada.
Impacto del Síndrome del Impostor en Profesionales
El fenómeno del síndrome del impostor se caracteriza por una profunda sensación de inseguridad y auto-duda entre quienes logran éxitos significativos. Esta experiencia puede llevar a las personas a cuestionar sus capacidades y a sentir que sus logros son fruto del azar o de circunstancias externas más que de su propio esfuerzo y talento.
Las repercusiones pueden ser severas, generando altos niveles de estrés y ansiedad. La presión por mantener un rendimiento elevado puede intensificar estos sentimientos, creando un ciclo vicioso donde el individuo siente que debe demostrar constantemente su valía. Este estado emocional puede tener efectos adversos no solo en la salud mental sino también en el desempeño profesional.
Caminos hacia la Conciencia y el Cambio
Es crucial abordar estas percepciones erróneas para fomentar un ambiente laboral más saludable. La educación sobre el síndrome del impostor y sus efectos podría ayudar a desestigmatizar estas experiencias, permitiendo a los profesionales reconocer sus logros sin miedo al juicio ajeno.
A medida que más personas comparten sus historias y experiencias relacionadas con esta ansiedad por sobrepago, se abre la puerta a conversaciones necesarias sobre salud mental en el trabajo. La comprensión colectiva puede contribuir a crear espacios donde todos se sientan valorados por lo que realmente son y no por lo que temen ser.