Un equipo de investigadores de la Universidad de Oxford ha presentado un innovador ‘microstent’ que promete revolucionar el tratamiento del glaucoma, una condición común pero debilitante. Este avance se detalla en un estudio publicado en The Innovation, Cell Press.
El glaucoma es una de las principales causas de pérdida de visión, solo superada por las cataratas. Según datos recientes, 7.7 millones de personas a nivel mundial estaban ciegas o con discapacidad visual debido al glaucoma en 2020. Esta afección puede provocar daños irreversibles en el nervio óptico debido al aumento de presión dentro del ojo. Los tratamientos actuales, que incluyen cirugías para crear aberturas o insertar tubos para drenar líquidos, son altamente invasivos y presentan riesgos de complicaciones, además de tener una durabilidad limitada.
Nueva esperanza en el tratamiento del glaucoma
El Dr. Yunlan Zhang, autor principal del estudio y miembro del equipo investigador, afirmó: “Nuestro microstent desplegable representa un avance significativo en el tratamiento del glaucoma”. Según él, los implantes quirúrgicos actuales han demostrado tener una efectividad a largo plazo limitada, siendo susceptibles a fallos por fibrosis (cicatrización) en el ojo.
Este nuevo microstent presenta una forma estructural única que le permite expandirse una vez insertado en el ojo. Con un diámetro de 200µm, menos de un cuarto de milímetro, su tamaño diminuto le permite encajar dentro de la aguja de una jeringa hipodérmica estándar para una inserción mínimamente invasiva. Una vez colocado y expandido, el microstent abarca el espacio lleno de líquido entre la parte blanca del ojo y la membrana que lo recubre.
Resultados prometedores en pruebas iniciales
Al mantener este espacio abierto, el stent reduce la acumulación excesiva de líquido y la presión intraocular responsable del tipo más común de glaucoma: el glaucoma primario de ángulo abierto. Las pruebas iniciales realizadas en conejos mostraron que los microstents lograron disminuir la presión ocular en menos de un mes con mínima inflamación y cicatrización. Además, se observó que este microstent conseguía una reducción mayor de la presión ocular comparado con un implante tubular estándar.
“Este desarrollo tiene el potencial de transformar el panorama terapéutico del glaucoma”, destacó el Dr. Jared Ching, coautor senior del estudio. “Esperamos mejorar los resultados clínicos y la calidad de vida de los pacientes mediante esta solución mejorada en cirugía mínimamente invasiva para glaucoma”.
Por su parte, el profesor Zhong You, también coautor senior y miembro del Departamento de Ciencias de la Ingeniería en Oxford, comentó: “Nuestro microstent está fabricado con una aleación durable y superflexible llamada nitinol, conocida por su seguridad a largo plazo para uso ocular”. Las propiedades únicas del material ayudan a prevenir movimientos posteriores, mejoran la durabilidad y aseguran eficacia a largo plazo.
Punto clave para mejorar la accesibilidad al tratamiento
El equipo investigador utilizó técnicas avanzadas de modelado para guiar el diseño del microstent y asegurar su compatibilidad con la anatomía ocular. Las propiedades superelásticas permiten que se adapte a los cambios y estiramientos del ojo sin deformaciones permanentes, aumentando así su durabilidad y funcionalidad.
En el Reino Unido, más de medio millón de personas padecen glaucoma –un 2% de todos los mayores de 40 años– lo que lo convierte en uno de los causantes más comunes de ceguera a nivel mundial. La introducción de este microstent podría marcar un paso crucial hacia la mejora en la eficacia y accesibilidad del tratamiento.
El estudio titulado ‘A Novel Deployable Microstent for the Treatment of Glaucoma’ ha sido publicado en The Innovation, Cell Press.