El Departamento de Ciencias de la Computación (DCC) de la Universidad de Chile celebró el pasado 10 de octubre su quincuagésimo aniversario, un evento que reunió a autoridades universitarias, miembros de la comunidad académica, funcionarios, estudiantes y egresados. La ceremonia se llevó a cabo en el Campus Beauchef y contó con la presencia de figuras destacadas como la Rectora Rosa Devés, el decano de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, Francisco Martínez, y el director del DCC, Aidan Hogan.
Bajo el lema “Celebramos nuestra historia y construimos el futuro”, el evento no solo conmemoró los hitos alcanzados por esta unidad pionera en formación e investigación tecnológica, sino que también incluyó exposiciones sobre proyectos actuales liderados por sus investigadores. Instituciones asociadas como el Instituto Milenio Fundamentos de los Datos (IMFD) y el Centro Nacional de Inteligencia Artificial (CENIA) participaron con stands que evidenciaron el dinamismo del departamento.
Durante su discurso, la Rectora Rosa Devés subrayó la importancia del DCC en la historia institucional y su papel en la transformación digital del país: “Ha sido un día emocionante, donde se ve toda la fuerza de la inteligencia, pero también toda la fuerza de la voluntad de hacer algo nuevo”. Esta reflexión resalta cómo un grupo visionario logró construir un departamento fundamental para Chile.
Un legado sólido y prometedor
El director del DCC, Aidan Hogan, inició su intervención utilizando una metáfora poderosa al comparar al departamento con un “árbol fuerte y joven”, listo para seguir creciendo. Rindió homenaje a los fundadores y a todos aquellos que han contribuido a su desarrollo. Además, destacó cómo el DCC ha sido clave en la adopción de tecnologías que hoy son parte integral de nuestras vidas: “El DCC ha sido protagonista en el desarrollo y adopción nacional de tecnologías tan grandes que hoy las damos por sentadas”.
No obstante, Hogan advirtió sobre las contradicciones presentes en el ámbito tecnológico actual. Mencionó que aunque las redes sociales conectan a las personas como nunca antes, también generan divisiones significativas a través de fenómenos como la desinformación y la polarización. Asimismo, resaltó las contribuciones del DCC en debates cruciales como las nuevas leyes sobre ciberseguridad y protección de datos personales.
Cerrando su discurso, enfatizó que “la computación ha transformado el mundo” y que es esencial que Chile trace su propio camino tecnológico: “El desafío es que el país pueda definir su futuro con la computación, no siempre siguiendo a las grandes tecnologías del hemisferio norte”. Su optimismo sobre el futuro tecnológico chileno fue evidente.
Misión universitaria ante desafíos globales
Por su parte, Francisco Martínez, decano de la FCFM, vinculó profundamente la historia del DCC con la misión más amplia de contribuir al desarrollo nacional. Afirmó que “la historia del DCC es una versión de la historia de la Universidad de Chile”, destacando cómo este departamento ha sembrado las bases para futuros avances tecnológicos en todo el país.
Martínez reflexionó sobre los retos contemporáneos ante una rápida evolución tecnológica: “Vivimos una época en que los avances nos superan. Tendremos que repensarnos para enfrentar este tremendo desafío. Pero donde hay desafíos, hay vida y construcción”. El espíritu innovador del DCC se perfila como clave para enfrentar estos retos futuros.