La Universidad de León y Cáritas Diocesanas han formalizado un acuerdo que marca un hito en su colaboración. Este convenio, que tiene una duración de cuatro años, busca potenciar la formación, sensibilización e impulso del voluntariado en la región. La rectora de la ULE, Nuria González, y la presidenta de Cáritas, Aurora Baza, fueron las encargadas de firmar este importante documento.
El acuerdo establece diversas iniciativas que incluyen proyectos de docencia e investigación conjunta, así como la posibilidad para los estudiantes de realizar prácticas en entornos donde puedan contribuir a mejorar la vida de las personas más desfavorecidas. Según González, esta colaboración refuerza el compromiso con los sectores más vulnerables y promueve la construcción de una sociedad “más justa y solidaria”.
Impulso al Voluntariado Universitario
Este convenio no solo beneficia a los estudiantes en su formación académica, sino que también les brinda la oportunidad de conocer de cerca las realidades sociales que enfrentan muchas personas. “Los alumnos podrán vivir experiencias significativas mientras ayudan a satisfacer las necesidades de nuestra sociedad”, añadió la rectora.
Además, el convenio contempla el desarrollo de proyectos específicos que se irán definiendo con los diferentes departamentos y centros académicos. Cada uno de estos proyectos estará diseñado para asegurar un impacto positivo tanto en los estudiantes como en la comunidad leonesa. “Es fundamental que cada iniciativa tenga el mejor encaje posible desde el punto de vista técnico, jurídico y económico”, enfatizó González.
Cercanía entre Jóvenes y Realidad Social
Aurora Baza subrayó la relevancia de acercar la labor social a los jóvenes universitarios. “Es crucial que los estudiantes conozcan nuestro día a día y comprendan las circunstancias que viven las personas más vulnerables”, afirmó. Esta interacción permitirá fomentar una ciudadanía universitaria más consciente y comprometida.
Con este convenio marco, ambas instituciones buscan fortalecer su colaboración existente y trabajar conjuntamente para unir el conocimiento académico con la realidad social. El objetivo es cultivar una comunidad universitaria activa y solidaria, dispuesta a hacer frente a los desafíos sociales actuales.