El sector de la bioenergía en Catalunya cuenta con 365 empresas que generan 872 millones de euros y emplean a 2.650 personas, según un estudio de ACCIÓ. Este ámbito, que incluye biomasa, biogás y biocombustibles, está en crecimiento, con un 28,4% de las empresas establecidas en la última década. La Generalitat impulsa el desarrollo del biogás, previniendo un aumento significativo en su producción para 2030, lo que podría multiplicar los ingresos del sector.
El sector de la bioenergía en Cataluña ha alcanzado un notable crecimiento, con un total de 365 empresas que generan una facturación agregada de 872 millones de euros y que emplean a aproximadamente 2.650 personas. Estas son algunas de las conclusiones más relevantes de un estudio realizado por ACCIÓ, la agencia dedicada a la competitividad empresarial del Departamento de Empresa y Trabajo, que ofrece una primera radiografía detallada de este ámbito.
Según el informe, elaborado en colaboración con el Clúster de Bioenergía de Cataluña, la bioenergía se refiere a una fuente renovable producida a partir de materiales biológicos, abarcando todo su proceso, desde la obtención del recurso hasta su valorización energética y el tratamiento de los residuos generados. Esta forma de energía es capaz de proporcionar calefacción, refrigeración, vapor, electricidad y combustible para el transporte. Las principales categorías dentro del sector incluyen la biomasa sólida (como estiércol, residuos orgánicos urbanos o biomasa forestal), el biogás y biometano, así como los biocombustibles líquidos.
Crecimiento y estructura del sector
El sector se encuentra en pleno desarrollo; aproximadamente el 28,4% de las empresas dedicadas a la bioenergía en Cataluña se establecieron en los últimos diez años. Desde una perspectiva comercial, el informe indica que la cadena de valor del sector se divide en proveedores del recurso (biomasa sólida o biogás), empresas encargadas de su transformación (producción de biocombustibles y aprovechamiento del biogás) y finalmente la distribución hacia los mercados energéticos y productos sostenibles. En Cataluña, esta cadena está enfocada principalmente en el aprovechamiento y transformación del recurso, mientras que la industria auxiliar aún no juega un papel significativo.
Más de la mitad de las empresas identificadas dentro de esta cadena se dedican al área de biomasa sólida, representando el 46% de la facturación total del sector. Asimismo, un 45% está relacionado con el biogás. Cabe destacar que alrededor del 24,2% son filiales de compañías extranjeras. Además, el ecosistema bioenergético catalán incluye asociaciones y centros de investigación vinculados al Clúster de Bioenergía.
Potencial futuro y retos
A día de hoy, Cataluña cuenta con 72 plantas operativas dedicadas al biogás; sin embargo, este campo sigue siendo emergente. En un contexto donde se fomentan políticas para la transición energética, se prevé que el potencial del biogás crezca significativamente. Se estima que para 2030 España podría alcanzar una producción anual cercana a los 20 TWh, concentrándose casi un 30% en Cataluña y el norte de Aragón.
A pesar del potencial existente gracias a recursos como residuos agrícolas e industriales abundantes en Cataluña para producir biometano, también surgen desafíos relacionados con su gestión ambiental. La promoción de una economía circular es crucial para abordar estos retos. El coste competitivo del biometano frente a otras tecnologías energéticas es otra ventaja destacable.
No obstante, el sector enfrenta varios desafíos: desde desarrollar nuevas tecnologías aplicadas a la biomasa hasta diversificar las fuentes utilizadas para obtener recursos energéticos avanzados. Atraer talento especializado y definir estrategias diferenciadoras serán claves para impulsar este ámbito en crecimiento.