Éxito de la VII Semana de Iniciación a la Investigación
La VII Semana de Iniciación a la Investigación, organizada por la Cátedra Global Nebrija en Recuperación de Energía en el Transporte de Superficie, ha culminado con éxito, alcanzando todos los objetivos planteados. Este evento, que ya se ha convertido en una tradición, reunió a un selecto grupo de estudiantes que se enfrentaron a un reto tecnológico y científico relacionado con la temática central de la Cátedra.
Este año, el desafío se centró en el _almacenamiento de energía eléctrica_, un tema crucial para garantizar la estabilidad de la red eléctrica, especialmente tras el reciente apagón que afectó al país. Los participantes exploraron diversas tecnologías, destacando el uso del volante de inercia por sus ventajas mecánicas y electrónicas.
Los equipos multidisciplinares formados durante esta semana permitieron abordar el reto desde diferentes perspectivas, enriqueciendo así las ideas iniciales y fomentando un enfoque integral sobre el problema planteado.
Innovación y aprendizaje práctico
Los alumnos no solo tuvieron la oportunidad de trabajar con impresoras 3D, arduinos y sensores fotoeléctricos, sino que también participaron en charlas impartidas por expertos en almacenamiento energético y realizaron una visita a una planta hidrogeneradora.
Estas experiencias han ampliado sus horizontes y les han permitido comprender mejor el complejo ámbito de la generación, almacenamiento y distribución eléctrica. Este conocimiento es fundamental para enfrentar los desafíos actuales relacionados con la energía.
El trabajo en equipo fue esencial. El viernes 27 se presentaron cuatro prototipos de volantes de inercia, que variaban entre 47 y 87 gramos de peso, capaces de almacenar energía mediante un pequeño motor. Posteriormente, al cambiar el circuito a modo generador, lograron recuperar parte de la energía almacenada.
Reconocimiento al esfuerzo colectivo
El desarrollo de estos montajes se llevó a cabo en un ambiente colaborativo excepcional. Cada vez que un equipo resolvía problemas técnicos, compartía sus descubrimientos con sus compañeros, lo que contribuyó al éxito general del reto.
Los detalles en la disposición y montaje de los componentes marcaron la diferencia en el rendimiento final. Finalmente, el jurado decidió premiar al equipo formado por Miguel Morcillo de Castro y Daniel Wasko Perarnau por su destacado trabajo.
El vicerrector de Investigación, Álvaro Bustinduy, hizo entrega del premio a los ganadores junto con diplomas para todos los participantes, quienes celebraron su experiencia compartiendo un ágape final.